General Fuente-Alba se reúne con militares de la III División
Valdivia. Fuente: Lorena Soto Guzmán.
Hasta la capital de la Región de Los Ríos se trasladó este jueves 14 de julio, el Comandante en Jefe del Ejército, General Juan Miguel Fuente-Alba, para dar a conocer sus lineamientos al personal, en el ámbito de preparación y operatividad de la fuerza terrestre para lo que resta del presente año y desafíos del 2012, en el marco de la serie de encuentros que ha sostenido en las unidades militares a lo largo del país.
A su llegada a Valdivia, acompañado por el Secretario General del Ejército, General de Brigada Alberto González, fue recibido por el Comandante en Jefe de la III División, General de Brigada Alejandro Maggi, para posteriormente dirigirse hasta el Campo Militar “Valdivia”, lugar del encuentro con el personal.
Ante 450 militares, provenientes del Cuartel General de la III División, de los Regimientos de Infantería Nº 8 “Tucapel”, de Infantería Nº 12 “Sangra”, de Telecomunicaciones Nº 4 “Membrillar”, de Artillería Nº 2 “Maturana” y Regimiento Reforzado Nº 9 “Arauco”, el General Fuente-Alba inició su intervención con un saludo, en el que les expresó su especial interés en realizar estas reuniones que permiten sostener una conversación cercana y responder así algunas inquietudes del personal. En este sentido, señaló que “el propósito fundamental de estos encuentros que he sostenido en el presente año en todo el Ejército, es compartir con ustedes ciertos aspectos profesionales que son fundamentales, lograr el contacto personal con quienes integran las unidades en las distintas guarniciones y que ustedes conozcan de parte del Comandante en Jefe, como ha sido el período 2010 -2011 y lo que esperamos del año 2012”, afirmó.
Asimismo, uno de los primeros aspectos que abordó el General Fuente-Alba frente al personal militar, fue la continuidad del Cuartel General de la III División en la capital de la Región de Los Ríos, donde aseguró que “el Comando de la III División de Ejército no se trasladará de Valdivia”.
De igual forma repasó lo que significó para la institución el apoyo prestado a la comunidad una vez ocurrido el terremoto del 27/F, contribuyendo a estrechar los lazos con la civilidad, generando un sentimiento de gratitud, “donde el Ejército reforzó aquella vinculación profunda con la comunidad”, lo que se convirtió en el principal valor agregado para la institución castrense, y que se logró, dijo, “gracias al trabajo de cada uno de los integrantes de la institución, especialmente de dos Divisiones de Ejército, la II y ustedes, la III División, todos los que trabajaron en 117 comunas afectadas”, puntualizó.
Igualmente recordó el esfuerzo desplegado recientemente por el personal de la III División debido a la erupción del Cordón Caulle, que en la misma línea de apoyo a la comunidad, significó una grata respuesta de la ciudadanía al trabajo institucional.
Con posterioridad, el General Fuente-Alba entregó sus orientaciones sobre las condiciones de preparación, capacitación y desarrollo de la fuerza institucional, con el propósito de dar continuidad al trabajo profesional efectuado hasta ahora. En este contexto indicó que la prioridad para el presente período debe ser la completación de unidades, para el logro de los máximos estándares de operatividad y alistamiento profesional. “El Ejército debe tener una fuerza en condiciones de operar, ser un instrumento eficaz, en el cumplimiento de sus objetivos”, expresó.
Luego, y tras interactuar con el personal, se refirió a uno de los primordiales aspectos de su concepto de mando, el respeto a las personas y a la preocupación que debe existir al interior de la institución para asegurar al personal las posibilidades de que puedan compatibilizar de manera integral sus capacidades profesionales, con su vida familiar y espacios de recreación. “Ello -dijo- “porque la institución requiere de personas integrales y equilibradas, y el Ejército debe brindar las condiciones para su crecimiento”.
Hasta la capital de la Región de Los Ríos se trasladó este jueves 14 de julio, el Comandante en Jefe del Ejército, General Juan Miguel Fuente-Alba, para dar a conocer sus lineamientos al personal, en el ámbito de preparación y operatividad de la fuerza terrestre para lo que resta del presente año y desafíos del 2012, en el marco de la serie de encuentros que ha sostenido en las unidades militares a lo largo del país.
A su llegada a Valdivia, acompañado por el Secretario General del Ejército, General de Brigada Alberto González, fue recibido por el Comandante en Jefe de la III División, General de Brigada Alejandro Maggi, para posteriormente dirigirse hasta el Campo Militar “Valdivia”, lugar del encuentro con el personal.
Ante 450 militares, provenientes del Cuartel General de la III División, de los Regimientos de Infantería Nº 8 “Tucapel”, de Infantería Nº 12 “Sangra”, de Telecomunicaciones Nº 4 “Membrillar”, de Artillería Nº 2 “Maturana” y Regimiento Reforzado Nº 9 “Arauco”, el General Fuente-Alba inició su intervención con un saludo, en el que les expresó su especial interés en realizar estas reuniones que permiten sostener una conversación cercana y responder así algunas inquietudes del personal. En este sentido, señaló que “el propósito fundamental de estos encuentros que he sostenido en el presente año en todo el Ejército, es compartir con ustedes ciertos aspectos profesionales que son fundamentales, lograr el contacto personal con quienes integran las unidades en las distintas guarniciones y que ustedes conozcan de parte del Comandante en Jefe, como ha sido el período 2010 -2011 y lo que esperamos del año 2012”, afirmó.
Asimismo, uno de los primeros aspectos que abordó el General Fuente-Alba frente al personal militar, fue la continuidad del Cuartel General de la III División en la capital de la Región de Los Ríos, donde aseguró que “el Comando de la III División de Ejército no se trasladará de Valdivia”.
De igual forma repasó lo que significó para la institución el apoyo prestado a la comunidad una vez ocurrido el terremoto del 27/F, contribuyendo a estrechar los lazos con la civilidad, generando un sentimiento de gratitud, “donde el Ejército reforzó aquella vinculación profunda con la comunidad”, lo que se convirtió en el principal valor agregado para la institución castrense, y que se logró, dijo, “gracias al trabajo de cada uno de los integrantes de la institución, especialmente de dos Divisiones de Ejército, la II y ustedes, la III División, todos los que trabajaron en 117 comunas afectadas”, puntualizó.
Igualmente recordó el esfuerzo desplegado recientemente por el personal de la III División debido a la erupción del Cordón Caulle, que en la misma línea de apoyo a la comunidad, significó una grata respuesta de la ciudadanía al trabajo institucional.
Con posterioridad, el General Fuente-Alba entregó sus orientaciones sobre las condiciones de preparación, capacitación y desarrollo de la fuerza institucional, con el propósito de dar continuidad al trabajo profesional efectuado hasta ahora. En este contexto indicó que la prioridad para el presente período debe ser la completación de unidades, para el logro de los máximos estándares de operatividad y alistamiento profesional. “El Ejército debe tener una fuerza en condiciones de operar, ser un instrumento eficaz, en el cumplimiento de sus objetivos”, expresó.
Luego, y tras interactuar con el personal, se refirió a uno de los primordiales aspectos de su concepto de mando, el respeto a las personas y a la preocupación que debe existir al interior de la institución para asegurar al personal las posibilidades de que puedan compatibilizar de manera integral sus capacidades profesionales, con su vida familiar y espacios de recreación. “Ello -dijo- “porque la institución requiere de personas integrales y equilibradas, y el Ejército debe brindar las condiciones para su crecimiento”.







