El nuevo ciclo que llegó con Bachelet [opinión]
Cruza la agenda política, la transforma y en buena hora. La ahora candidata presidencial Michelle Bachelet llegó a Chile y a menos de 15 horas de su arribo anunció que ha “tomado la decisión”. En Osorno y en las vísperas del mensaje hablan por radio los diputados del distrito 55; no la ciudadanía, ni las organizaciones, ni los partidos políticos –PS y PPD- ni otras instituciones que deberán trabajar con fuerza y desde hoy en la campaña a Primarias de la ex Presidenta.
Y es lógico, son las fuentes de información y opinión formales, validadas en las urnas, en los medios, pero que en nuestra opinión requieren de una nueva mirada a la hora de plasmar en la agenda y en sus declaraciones los temas urgentes, los mismos que deben estar en la campaña que ya parte desde este nuevo escenario.
Más de 3 años hablando de más participación y en el Congreso se esmeran por ponerle letra chicha a la Ley de Primarias; más de 3 años hablando de crecimiento y desarrollo y en Osorno hoy proliferan los campamentos sin construcción de nuevas viviendas sociales; más de 3 años de marchas estudiantiles y continúa el escándalo con el lucro de la educación superior y las brechas de calidad entre colegios públicos y privados; más de 3 años de mala salud pública pese a la ampliación del Plan Auge; muchos años exigiendo trabajo decente en medio de la vieja cantinela de las cifras macroeconómicas con discursos “a b u r r i d os” y frustrantes. Poco y nada de reformas reales…
Años, y para ser sinceros, más de 3 denunciando DESIGUALDAD, y hasta hora, muchos abusos. Imagine que según un reciente estudio de los economistas Ramón López, Eugenio Figueroa y Pablo Gutiérrez, el ingreso del 1% más rico en Chile es 40 veces mayor que el del 81% de la población.
Las reformas políticas, el nuevo trato entre el Estado y el pueblo mapuche, la sustentabilidad del país, el medioambiente y otras, son materias importantes a abordar y no pueden no haber pronunciamientos, más allá de los discursos que hoy y en Semana Santa seguirán centrándose, claro está, más a favor que en contra del regreso de Bachelet.
Una regla del discurso político tiene que ver con que lo urgente hay que decirlo, decirlo y decirlo, y eso se refuerza aún más cuando ni los medios ni la comunicación cotidiana permiten profundizar en ello. Temas importantes o no, cercanos o no, juzgue usted.
Y es que el nuevo ciclo de la candidata presidencial refresca miradas, transforma y le da potencia a la agenda, qué duda cabe. Desde el Partido Socialista se plantea realizar “Primarias a todo evento” para elegir candidaturas parlamentarias pero hoy de nada sirven si no hay una sintonía y programa concreto que sea capaz de contrastar o encontrar puntos comunes entre los aspirantes de Oposición. Tampoco si no fortalece un programa de Gobierno “solidario, igualitario y participativo”, hecho con la gente.
Los pre candidatos existen, pero el debate no puede centrarse en si hacer Primarias o no, sino por qué debemos hacerlas y qué impacto tendrá en los electores y los que no lo son, no sólo en los partidos. “Primarias con programa, a todo evento” pudiera ser parte y la consigna de este nuevo ciclo.
En eso hay que avanzar a nivel local, ahora… mañana será tarde.
Anoche, Michelle Bachellet dio señales y centró su urgencia, precisamente, en la lucha contra la desigualdad. Llegó asumiendo que “hubo cosas que no hicimos bien” y reconoció que “los avances contra la pobreza no se han traducido significativamente”. Es más, admitir que “hay malestar”, “que la gente lo está pasando mal”, e identificar como foco “los estudiantes”, “las regiones y el centralismo”, dan cuenta que su visión y diagnóstico no es el mismo que el de la Derecha y por ende es otro el futuro del país. Desde ayer los candidatos presidenciales de la Alianza han insistido que Chile vive con pleno empleo, que es un país mejor y que los temas a discutir son los valóricos o los problemas limítrofes.
Michelle habló anoche y dijo estar dispuesta a competir en Primarias, “un camino legítimo y válido” y marcó un a vía que a nivel local se resiste. En el distrito 55 ninguno de los dos diputados pondrá su cupo en riesgo, lo que poco de novedoso tiene si la agenda la ocupan -de verdad- las urgencias. En torno a ello hay que convocar, participar, proponer.
En este “nuevo ciclo”, con la desigualdad despertando miradas, Osorno y esta provincia tienen mucho qué decir.
Escribe Francisco Reyes Castro, periodista, presidente provincial del Partido Socialista.
Y es lógico, son las fuentes de información y opinión formales, validadas en las urnas, en los medios, pero que en nuestra opinión requieren de una nueva mirada a la hora de plasmar en la agenda y en sus declaraciones los temas urgentes, los mismos que deben estar en la campaña que ya parte desde este nuevo escenario.
Más de 3 años hablando de más participación y en el Congreso se esmeran por ponerle letra chicha a la Ley de Primarias; más de 3 años hablando de crecimiento y desarrollo y en Osorno hoy proliferan los campamentos sin construcción de nuevas viviendas sociales; más de 3 años de marchas estudiantiles y continúa el escándalo con el lucro de la educación superior y las brechas de calidad entre colegios públicos y privados; más de 3 años de mala salud pública pese a la ampliación del Plan Auge; muchos años exigiendo trabajo decente en medio de la vieja cantinela de las cifras macroeconómicas con discursos “a b u r r i d os” y frustrantes. Poco y nada de reformas reales…
Años, y para ser sinceros, más de 3 denunciando DESIGUALDAD, y hasta hora, muchos abusos. Imagine que según un reciente estudio de los economistas Ramón López, Eugenio Figueroa y Pablo Gutiérrez, el ingreso del 1% más rico en Chile es 40 veces mayor que el del 81% de la población.
Las reformas políticas, el nuevo trato entre el Estado y el pueblo mapuche, la sustentabilidad del país, el medioambiente y otras, son materias importantes a abordar y no pueden no haber pronunciamientos, más allá de los discursos que hoy y en Semana Santa seguirán centrándose, claro está, más a favor que en contra del regreso de Bachelet.
Una regla del discurso político tiene que ver con que lo urgente hay que decirlo, decirlo y decirlo, y eso se refuerza aún más cuando ni los medios ni la comunicación cotidiana permiten profundizar en ello. Temas importantes o no, cercanos o no, juzgue usted.
Y es que el nuevo ciclo de la candidata presidencial refresca miradas, transforma y le da potencia a la agenda, qué duda cabe. Desde el Partido Socialista se plantea realizar “Primarias a todo evento” para elegir candidaturas parlamentarias pero hoy de nada sirven si no hay una sintonía y programa concreto que sea capaz de contrastar o encontrar puntos comunes entre los aspirantes de Oposición. Tampoco si no fortalece un programa de Gobierno “solidario, igualitario y participativo”, hecho con la gente.
Los pre candidatos existen, pero el debate no puede centrarse en si hacer Primarias o no, sino por qué debemos hacerlas y qué impacto tendrá en los electores y los que no lo son, no sólo en los partidos. “Primarias con programa, a todo evento” pudiera ser parte y la consigna de este nuevo ciclo.
En eso hay que avanzar a nivel local, ahora… mañana será tarde.
Anoche, Michelle Bachellet dio señales y centró su urgencia, precisamente, en la lucha contra la desigualdad. Llegó asumiendo que “hubo cosas que no hicimos bien” y reconoció que “los avances contra la pobreza no se han traducido significativamente”. Es más, admitir que “hay malestar”, “que la gente lo está pasando mal”, e identificar como foco “los estudiantes”, “las regiones y el centralismo”, dan cuenta que su visión y diagnóstico no es el mismo que el de la Derecha y por ende es otro el futuro del país. Desde ayer los candidatos presidenciales de la Alianza han insistido que Chile vive con pleno empleo, que es un país mejor y que los temas a discutir son los valóricos o los problemas limítrofes.
Michelle habló anoche y dijo estar dispuesta a competir en Primarias, “un camino legítimo y válido” y marcó un a vía que a nivel local se resiste. En el distrito 55 ninguno de los dos diputados pondrá su cupo en riesgo, lo que poco de novedoso tiene si la agenda la ocupan -de verdad- las urgencias. En torno a ello hay que convocar, participar, proponer.
En este “nuevo ciclo”, con la desigualdad despertando miradas, Osorno y esta provincia tienen mucho qué decir.
Escribe Francisco Reyes Castro, periodista, presidente provincial del Partido Socialista.