¿Pura imaginación o “creatividad” nacional?: El abuso de los grandes empresarios

Por Dr. Franco Lotito C. – www.aurigaservicios.cl

Si de "imaginación" se trata, ya no resulta tan difícil imaginar cómo los señores empresarios se han asociado y coludido entre sí –apoyados, naturalmente, por las generosas leyes aprobadas por sus grandes amigos y socios cercanos, los señores políticos– para engañar de manera vil y alevosa a millones de chilenos, realidad que incluye el beneplácito y aprobación de los gobiernos de turno. ¿Dónde quedó la tan mentada Responsabilidad Social Empresarial de la cual tanto hablan el Gobierno y los empresarios? ¿Y el trillado “mejoramiento” de la calidad de la política chilena?

Por el contrario. Algunos de los más generosos en permitir las “creativas” estafas y engaños –al por mayor– de los chilenos, han sido, curiosamente, los gobiernos de la presidenta Bachelet, el gobierno del ex presidente Lagos (caso MOPGATE, EFEGATE, CONCONGATE, CHILEDEPORTEGATE, ENAPGATE, etc.) y el gobierno de ex presidente Piñera.

¿Algunos “pequeños ejemplos? Aquí van: la infame colusión de los pollos, la enfermante colusión de las farmacias, la asfixiante colusión de los buses interurbanos, la sucia colusión de las papeleras, la infecciosa colusión de las ISAPRES, la clara colusión de las empresas de telecomunicaciones para mantener los precios más altos de Latinoamérica en servicios de internet y telefonía, la colusión abusiva de los bancos y financieras, las reiteradas estafas de las grandes tiendas y supermercados con los “préstamos” y las tarjetas de crédito con intereses abusivos (Polar, Falabella, Johnson, Cencosud, Líder, Unimarc), los abusos de las líneas aéreas (con LANCHILE a la cabeza, una ex empresa de Piñera y del grupo CUETO), el gran negociado de Davalito, el hijo “estrella” de la presidenta Bachelet junto a su nuera con el caso CAVAL, las coimas, el cohecho y la compra de senadores, diputados, ministros de Estado y subsecretarios de Estado llevadas a cabo por empresas como: SOQUIMICH de Ponce Lerou, CORPESCA del grupo económico ANGELINI, el grupo económico PENTA de Délano y Lavín, el grupo económico LUKSIC, la papelera CMPC del grupo económico MATTE, la papelera PISA del ex ministro de Estado GABRIEL RUIZ TAGLE con sus negocios mafiosos mientras era un alto funcionario del Gobierno de Piñera… y, lamentablemente, un larguísimo etcétera.

Inclúyanse las reiteradas huelgas de los servicios públicos, con el récord del Servicio de Registro Civil, las huelgas de los profesores, las grandes mentiras sobre cómo "mejorar" la salud y la educación en Chile, la ocultación de la verdad sobre el avance del SIDA en los jóvenes chilenos y la pérdida del control sobre esta gravísima enfermedad, el aumento explosivo de la delincuencia y de la criminalidad, y las bajas penas a quienes roban, destruyen y matan... si es que se los castiga.

Y la otra gran vergüenza de un gobierno que se considera “cercano a la gente”: grabar con el impuesto del IVA la compra de una casa, por cuanto, CADA UNO de los materiales con que se construye una casa ya han sido recargados hasta diez veces con el IVA: el que tiene un bosque paga IVA, el que corta un árbol de ese bosque paga IVA, el que convierte la madera en tablas paga IVA, el que traslada la madera hasta un punto de acopio paga IVA, el que distribuye la madera paga IVA, el que vende la madera en la barraca paga IVA y, finalmente, el cliente que compra la madera en la barraca paga, una vez más, IVA. ¿Entonces, en qué quedamos?

Parece que, definitivamente, nuestro querido país se ha argentinizado, mexicanizado y brasilianizado de una sola vez, cayendo por el abismo de la corrupción desatada y sin límites, incluyendo las "construcciones chantas" de puentes como el famoso –y ahora internacionalmente conocido– puente "basculante" Cau-Cau, que fue ¡¡construido al revés!! en Valdivia; el malogrado y fallido puente de Río Bueno en la décima Región; las desastrosas construcciones de hospitales, cuyos "valores" finales se disparan hasta en cinco veces su valor original y que luego se cargan con costo al bolsillo de todos los chilenos... si es que alguna vez se los termina de construir.

En definitiva: en Chile tenemos ciudadanos de primera categoría (el 1% de la población) con privilegios especiales, fuero parlamentario incluido e inmunidad para estafar, y ciudadanos de segunda, es decir todo el resto de la población de Chile (a saber, el 99% que "sobra"), a la cual se puede expoliar, explotar, engañar, manipular y estafar con toda impunidad. ¡Qué rabia y qué impotencia por tener que vivir tanta injusticia y, lo peor, que haya autoridades que lo permitan! Se nota lo mucho que nos "quieren" las autoridades de gobierno.

Una pequeña solicitud: Por favor: ¡¡no nos quieran tanto!!


Fuente: Franco Lotito C - flotitoc@gmail.com
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