Emprendedoras lideran el desarrollo culinario de San Juan de la Costa

Ligadas a la pesca artesanal, una veintena de mujeres se está capacitando con recursos del Gobierno para desarrollar sus propios negocios en las líneas de artesanía, turismo, proceso de productos y gastronomía. Chacareros marinos, pizzas de cochayuyo y empanadas de sierra, son algunas preparaciones con las que esperan seducir el paladar de los visitantes del litoral de la Provincia de Osorno.

La creatividad culinaria en el litoral de la comuna San Juan de la Costa no tiene límites. Con el mar como una gran despensa de productos de primera calidad y el apoyo del programa “Tejiendo Redes, Mujer Emprendedora de la Pesca Artesanal”, un grupo de pescadoras artesanales de Bahía Mansa, Tril Tril, Pucatrihue y Maicolpué, están dando vida culinaria al litoral de la Provincia de Osorno, con una extraordinaria carta de platos elaborados con los ingredientes de una zona rica en mariscos, algas y pescados.

Pizzas y mermeladas de cochayuyo, chacareros marinos preparados con lapas apanadas, empanadas de sierra, y un extraordinario quiché de sierra ahumada, son parte de las preparaciones que esperan seducir el paladar de los turistas que lleguen hasta estas localidades costeras.

Gracias al programa, que es una iniciativa con enfoque de género del Fondo de Fomento para Pesca Artesanal de Sernapesca, una veintena de mujeres entre 18 y 60 años que tienen su Registro Pesquero Artesanal (RPA) vigente, se capacitan para fortalecer sus emprendimientos. Trabajan en cuatro líneas de apoyo orientadas al procesamiento de productos del mar, el turismo de intereses especiales, la artesanía con identidad local, y la gastronomía, actividad que ha tomado especial fuerza.

“Como Gobierno, y así lo ha comprometido el Presidente Sebastián Piñera, estamos convencidos que la mujer debe tener un rol más preponderante en la vida laboral. En un trabajo independiente, como es la pesca artesanal, el programa Tejiendo Redes permite que las mujeres se capaciten, que reciban las herramientas para poder dar valor agregado a sus productos, y que se incorporen a actividades como la gastronomía y el turismo”, precisó el seremi de Economía Francisco Muñoz.

El programa, que tiene tres fases o niveles. Prepara preliminarmente a las beneficiarias para emprender y gestionar su emprendimiento, y luego en una segunda fase, les entrega conocimientos específicos para su línea de negocio.

En las salas de la Escuela San Pío de Bahía Mansa, 20 mujeres del mar que se preparan en la etapa inicial recibieron la visita de la seremi de la Mujer y Equidad de Género, Viviana Sanhueza.

“Sabemos que ellas están aquí para mejorar la calidad de vida de sus familias, porque cuando una mujer emprende, los ingresos que alcanza con su negocio llegan a sus hogares. Hoy con la Agenda Mujer que impulsa el Presidente Piñera estamos generando un cambio histórico en la forma en que nuestra sociedad trata a sus mujeres, y en ello la autonomía económica es clave. Estos programas les permiten emprender, obtener recursos, y ser parte del desarrollo productivo de su territorio a través del turismo, lo que las empodera en sus comunidades”, sostuvo la secretaria regional.

Las recetas

Junto a la veintena de beneficiarias que inicia el camino comercial, otras tres ya egresaron de la segunda etapa del programa y hoy están a la espera de pasar a la tercera fase que les permitirá consolidar sus negocios.

Tal es el caso de Pamela Nitor, quien contó que se capacitó durante dos años en el programa, sin salir de Bahía Mansa, logrando afinar dos preparaciones que causaron furor en la última temporada estival.


“En la primera fase me enseñaron a llevar el negocio, y en la segunda vino un chef de Puerto Montt a preparar y diseñar platos con nosotras. De allí salieron mis dos platos estrella, el quiché de sierra ahumada y el chacarero marino, que en vez de carne lleva lapas apanadas en harina de cochayuyo. También lleva porotos verdes, tomate, y una salsa de crema con ciboulette. Se sirve en vez de pan en sopaipillas. En el verano en Maicolpué llegué a vender 40 sandwichs al día, preparados por lapas que recolectamos nosotras mismas”, contó.

La fusión de la cocina italiana y las algas chilenas es la especialidad de Mireya Espina, recolectora de Pucatrihue. “La masa lleva harina de trigo y de cochayuyo. Encima, como toda pizza lleva tomates, queso y orégano, además de cebolla, longaniza ahumada y cochayuyo. Es un plato que sale harto, hay mucha gente que lo pide”, relató.

En su local llamado Del Bosque al Mar, Eva Millao ofrece ceviche de ulte, que es el cochayuyo fresco. “Nosotras elaboramos platos con lo que aquí hay, con los productos frescos que el mar nos da. El ulte se une con sierra, morrón, cebolla, ajos, limón, ají verde y cilantro. Aquí hay muchos productos para hacer ceviches y empanadas. También hago empanadas de lapas y de sierra, invitó a los turistas a probar nuestros platos y visitar nuestras caletas”, dijo.

Fuente: Luis Toledo Mora
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