💡Entre fracaso y genialidad
Por: Héctor Maturana, Ing. Ejecución en Marketing UDP, Magister en PolÃtica y Gobierno UdeC, Licenciado en Marketing UDP, Diplomado en Finanzas UC.
En el ADN de los emprendedores, coexiste ese pánico al fracaso y esa porfÃa ciega. Pero son ellos los que aman recorrer ese borde entre fracasados sin ningún peso y genios admirados. La paradoja es que los primeros generan distancia, no existen, o son el centro de burlas ocultas. Los segundos se erigen como un sol que ilumina a todos, y todos quieren arrogarse su luz.
En nuestro devenir de juventud, todos nos aclaran el camino impulsándonos a postular para ser contratados a esa gran empresa, a esa compañÃa descollante, indestructible a una fuente de empleo seguro.
Pero olvidamos que una vez, quizá hace muchos años un loco sin remedio, un soñador, un agotado y desesperanzado tocador de puertas, cuyo banco le dijo muchas veces no, tuvo una idea, esas ideas que generan esa sensación de estar al borde del precipicio y probablemente su familia y sus amigos lo desaconsejaban de ese camino suicida y le pedÃan que volviera a ese cobijo seguro de empleo que provee la gran empresa.
Es un ciclo, los que hoy son grandes empresarios, empresas sólidas generadoras de empleo, también fueron soñadores.
Escuche con atención la entrevista en PaÃslobo Prensa del empresario Osornino Alejandro Fernández, sentà su desesperanza, pero también entendà que se va a poner de pie. Alejandro te necesitamos más que nunca, necesitamos más que nunca de estos aventureros que limitan entre genio y el fracaso.
Hoy en modo COVID-19 la fibra de esos Quijotes del libre mercado está a prueba. Su coraje y su resistencia están nuevamente al lÃmite. Los necesitamos, son ellos el verdadero motor de la economÃa, son los generadores de empleo, es la gente que mueve esta Región y nuestro PaÃs.
Referencia: https://www.paislobo.cl/2020/05/critica-situacion-de-restaurantes-bajo.html
En el ADN de los emprendedores, coexiste ese pánico al fracaso y esa porfÃa ciega. Pero son ellos los que aman recorrer ese borde entre fracasados sin ningún peso y genios admirados. La paradoja es que los primeros generan distancia, no existen, o son el centro de burlas ocultas. Los segundos se erigen como un sol que ilumina a todos, y todos quieren arrogarse su luz.
En nuestro devenir de juventud, todos nos aclaran el camino impulsándonos a postular para ser contratados a esa gran empresa, a esa compañÃa descollante, indestructible a una fuente de empleo seguro.
Pero olvidamos que una vez, quizá hace muchos años un loco sin remedio, un soñador, un agotado y desesperanzado tocador de puertas, cuyo banco le dijo muchas veces no, tuvo una idea, esas ideas que generan esa sensación de estar al borde del precipicio y probablemente su familia y sus amigos lo desaconsejaban de ese camino suicida y le pedÃan que volviera a ese cobijo seguro de empleo que provee la gran empresa.
Es un ciclo, los que hoy son grandes empresarios, empresas sólidas generadoras de empleo, también fueron soñadores.
Escuche con atención la entrevista en PaÃslobo Prensa del empresario Osornino Alejandro Fernández, sentà su desesperanza, pero también entendà que se va a poner de pie. Alejandro te necesitamos más que nunca, necesitamos más que nunca de estos aventureros que limitan entre genio y el fracaso.
Hoy en modo COVID-19 la fibra de esos Quijotes del libre mercado está a prueba. Su coraje y su resistencia están nuevamente al lÃmite. Los necesitamos, son ellos el verdadero motor de la economÃa, son los generadores de empleo, es la gente que mueve esta Región y nuestro PaÃs.
Referencia: https://www.paislobo.cl/2020/05/critica-situacion-de-restaurantes-bajo.html