Cierre de colegios en Río Bueno y Paillaco deja en incertidumbre a cientos de estudiantes y docentes
Cierre de colegios Cardenal Raúl Silva Henríquez: incertidumbre y deudas golpean a la comunidad educativa.
La situación de los colegios Cardenal Raúl Silva Henríquez, en las comunas de Río Bueno y Paillaco, ha llegado a un punto crítico, con el cierre definitivo de la institución en Río Bueno y un panorama incierto para la sede en Paillaco. Las dificultades financieras de la corporación sostenedora han impactado directamente a más de 400 estudiantes y 70 trabajadores, quienes enfrentan el fin de sus actividades académicas en condiciones adversas.
El profesor Jorge Colipué, vocero de los docentes en Río Bueno, confirmó que se decidió adelantar el cierre del año escolar, debido a la negativa de la Superintendencia de Educación de instalar un administrador provisorio que permitiera concluir el período en mejores condiciones. "Desde septiembre, nuestras remuneraciones comenzaron a disminuir hasta alcanzar solo un 35% el último mes, y nuestras imposiciones no se han pagado desde julio", declaró Colipué.
El cierre definitivo fue comunicado a los estudiantes en un almuerzo simbólico que incluyó a egresados de cuarto medio. "Bajo estas condiciones, consideramos que no era digno ni prudente seguir prestando el servicio educativo", afirmó.
En Paillaco, el panorama es diferente pero igualmente crítico. Según Cristian Riveros, Presidente del Centro General de Padres, las clases continúan gracias al compromiso de los profesores, pese a que solo han recibido el 40% de sus salarios. "Los profesores están aquí por amor a sus alumnos, pero es una agonía. Los sostenedores prácticamente desaparecieron y no han cumplido con las promesas hechas por las autoridades", aseguró. El colegio de Paillaco cuenta con una matrícula de aproximadamente 150 estudiantes y 33 trabajadores. Aunque el cierre parece inminente, los docentes se mantienen firmes en su decisión de finalizar el año escolar como muestra de compromiso con los niños y sus familias.
La representante legal de la Corporación Cardenal Raúl Silva Henríquez, Maritza Molina, confirmó que la institución se encuentra en proceso de liquidación voluntaria debido a problemas financieros insostenibles. Reconoció las deudas en sueldos e imposiciones, y aseguró que el cierre académico en Río Bueno se realizó de manera ordenada, con notas y evaluaciones al día. Sin embargo, no entregó detalles concretos sobre una solución para los afectados en Paillaco.
La situación ha generado una profunda preocupación en las familias, que ven cómo sus hijos enfrentan la incertidumbre sobre el futuro de su educación. En el caso de Paillaco, el cierre podría significar la interrupción de un vínculo emocional fuerte entre estudiantes y docentes, quienes han mantenido sus esfuerzos pese a las adversidades.
La situación de los colegios Cardenal Raúl Silva Henríquez, en las comunas de Río Bueno y Paillaco, ha llegado a un punto crítico, con el cierre definitivo de la institución en Río Bueno y un panorama incierto para la sede en Paillaco. Las dificultades financieras de la corporación sostenedora han impactado directamente a más de 400 estudiantes y 70 trabajadores, quienes enfrentan el fin de sus actividades académicas en condiciones adversas.
Río Bueno: fin del ciclo educativo
El profesor Jorge Colipué, vocero de los docentes en Río Bueno, confirmó que se decidió adelantar el cierre del año escolar, debido a la negativa de la Superintendencia de Educación de instalar un administrador provisorio que permitiera concluir el período en mejores condiciones. "Desde septiembre, nuestras remuneraciones comenzaron a disminuir hasta alcanzar solo un 35% el último mes, y nuestras imposiciones no se han pagado desde julio", declaró Colipué.
El cierre definitivo fue comunicado a los estudiantes en un almuerzo simbólico que incluyó a egresados de cuarto medio. "Bajo estas condiciones, consideramos que no era digno ni prudente seguir prestando el servicio educativo", afirmó.
En Paillaco, el panorama es diferente pero igualmente crítico. Según Cristian Riveros, Presidente del Centro General de Padres, las clases continúan gracias al compromiso de los profesores, pese a que solo han recibido el 40% de sus salarios. "Los profesores están aquí por amor a sus alumnos, pero es una agonía. Los sostenedores prácticamente desaparecieron y no han cumplido con las promesas hechas por las autoridades", aseguró. El colegio de Paillaco cuenta con una matrícula de aproximadamente 150 estudiantes y 33 trabajadores. Aunque el cierre parece inminente, los docentes se mantienen firmes en su decisión de finalizar el año escolar como muestra de compromiso con los niños y sus familias.
La representante legal de la Corporación Cardenal Raúl Silva Henríquez, Maritza Molina, confirmó que la institución se encuentra en proceso de liquidación voluntaria debido a problemas financieros insostenibles. Reconoció las deudas en sueldos e imposiciones, y aseguró que el cierre académico en Río Bueno se realizó de manera ordenada, con notas y evaluaciones al día. Sin embargo, no entregó detalles concretos sobre una solución para los afectados en Paillaco.
La situación ha generado una profunda preocupación en las familias, que ven cómo sus hijos enfrentan la incertidumbre sobre el futuro de su educación. En el caso de Paillaco, el cierre podría significar la interrupción de un vínculo emocional fuerte entre estudiantes y docentes, quienes han mantenido sus esfuerzos pese a las adversidades.
El caso pone en evidencia la falta de mecanismos eficaces para intervenir en situaciones de crisis en instituciones educativas privadas y subvencionadas, dejando a cientos de estudiantes y trabajadores en una situación de vulnerabilidad.
Fuente información: Christian Peschke
Fuente información: Christian Peschke
