Crisis habitacional en Chile: ¿Cómo resolver el déficit de 1,5 millones de hogares?
Déficit Cero propone soluciones para el acceso a la vivienda en Chile: la meta del millón y medio.
El déficit habitacional en Chile ha alcanzado cifras alarmantes, con más de 1,5 millones de hogares que no tienen acceso a una vivienda adecuada, según Sebastián Bowen, Director de Déficit Cero. En una entrevista con Paislobo Prensa, el experto expuso las claves para enfrentar esta crisis estructural que afecta a miles de familias en el país.
El aumento de la población y los cambios sociales han incrementado la demanda por viviendas, mientras que la oferta no ha logrado seguir el ritmo. Según Bowen, en 2002 había aproximadamente 4,3 millones de hogares en Chile, cifra que se elevó a 6,8 millones en 2023. Sin embargo, la cantidad de permisos de edificación ha disminuido, siendo menos de un tercio de lo registrado en 2006.
Además, el acceso al crédito hipotecario se ha vuelto inalcanzable para gran parte de la población. Actualmente, solo el 15% de los chilenos puede costear los dividendos necesarios para adquirir una vivienda adecuada, situación agravada por el aumento sostenido en los precios de las propiedades, que han crecido hasta cuatro veces más rápido que los salarios.
Déficit Cero, una organización nacida de la alianza entre Techo para Chile y la Cámara Chilena de la Construcción, plantea una agenda de reformas estructurales para abordar esta problemática desde múltiples frentes:
El déficit habitacional en Chile ha alcanzado cifras alarmantes, con más de 1,5 millones de hogares que no tienen acceso a una vivienda adecuada, según Sebastián Bowen, Director de Déficit Cero. En una entrevista con Paislobo Prensa, el experto expuso las claves para enfrentar esta crisis estructural que afecta a miles de familias en el país.
El aumento de la población y los cambios sociales han incrementado la demanda por viviendas, mientras que la oferta no ha logrado seguir el ritmo. Según Bowen, en 2002 había aproximadamente 4,3 millones de hogares en Chile, cifra que se elevó a 6,8 millones en 2023. Sin embargo, la cantidad de permisos de edificación ha disminuido, siendo menos de un tercio de lo registrado en 2006.
Además, el acceso al crédito hipotecario se ha vuelto inalcanzable para gran parte de la población. Actualmente, solo el 15% de los chilenos puede costear los dividendos necesarios para adquirir una vivienda adecuada, situación agravada por el aumento sostenido en los precios de las propiedades, que han crecido hasta cuatro veces más rápido que los salarios.
Déficit Cero, una organización nacida de la alianza entre Techo para Chile y la Cámara Chilena de la Construcción, plantea una agenda de reformas estructurales para abordar esta problemática desde múltiples frentes:
1.- Fondo de Garantía para Sectores Medios
Inspirado en modelos internacionales, como el Reino Unido y Australia, este fondo estatal garantizaría hasta el 50% de los créditos hipotecarios, permitiendo que sectores medios, actualmente excluidos del mercado, accedan a la vivienda.
2.- Polos de oportunidad territorial
Bowen destacó la existencia de más de 35.000 hectáreas urbanas en ciudades clave del país que podrían ser habilitadas mediante infraestructura sanitaria y eléctrica. Además, propuso la densificación equilibrada en zonas con acceso a transporte público, lo que podría generar hasta 5 millones de soluciones habitacionales.
3.- Gestión de suelo en áreas urbanas
La organización identificó más de 2.800 hectáreas de sitios eriazos con potencial para convertirse en proyectos habitacionales. Para esto, sugieren un modelo de colaboración público-privada que combine inversión estatal con incentivos para desarrolladores inmobiliarios.
El gobierno ha establecido una meta de 260.000 soluciones habitacionales para 2026, basándose en la Ley de Integración Social y Urbana aprobada en 2021. Si bien Bowen valora esta iniciativa por su capacidad de innovar y establecer estándares para futuras administraciones, advierte que cubre solo un 20% del déficit habitacional total.
“El desafío no solo es construir más viviendas, sino diversificar la oferta para responder a la creciente complejidad de la demanda, que incluye hogares unipersonales, familias migrantes y sectores medios afectados por la exclusión financiera”, enfatizó.
Regiones como Los Lagos, Los Ríos y Maule han mostrado un avance significativo en la ejecución del plan habitacional, gracias a la disponibilidad de suelo y un ritmo de construcción acelerado. No obstante, el norte del país enfrenta mayores dificultades debido a la escasez de terrenos aptos para desarrollo.
Fuente información: Rocío Gambra
2.- Polos de oportunidad territorial
Bowen destacó la existencia de más de 35.000 hectáreas urbanas en ciudades clave del país que podrían ser habilitadas mediante infraestructura sanitaria y eléctrica. Además, propuso la densificación equilibrada en zonas con acceso a transporte público, lo que podría generar hasta 5 millones de soluciones habitacionales.
3.- Gestión de suelo en áreas urbanas
La organización identificó más de 2.800 hectáreas de sitios eriazos con potencial para convertirse en proyectos habitacionales. Para esto, sugieren un modelo de colaboración público-privada que combine inversión estatal con incentivos para desarrolladores inmobiliarios.
El gobierno ha establecido una meta de 260.000 soluciones habitacionales para 2026, basándose en la Ley de Integración Social y Urbana aprobada en 2021. Si bien Bowen valora esta iniciativa por su capacidad de innovar y establecer estándares para futuras administraciones, advierte que cubre solo un 20% del déficit habitacional total.
“El desafío no solo es construir más viviendas, sino diversificar la oferta para responder a la creciente complejidad de la demanda, que incluye hogares unipersonales, familias migrantes y sectores medios afectados por la exclusión financiera”, enfatizó.
Regiones como Los Lagos, Los Ríos y Maule han mostrado un avance significativo en la ejecución del plan habitacional, gracias a la disponibilidad de suelo y un ritmo de construcción acelerado. No obstante, el norte del país enfrenta mayores dificultades debido a la escasez de terrenos aptos para desarrollo.
Fuente información: Rocío Gambra