Cuarto aniversario del Día Nacional de las Cantineras y 146 años de la Batalla de Tarapacá

Cuarto aniversario del Día Nacional de las Cantineras
Este 27 de noviembre conmemoramos el cuarto aniversario del Día Nacional de las Cantineras, una fecha destinada a reconocer a las mujeres que apoyaron a las tropas en conflictos como la Guerra contra la Confederación Perú-Boliviana y la Guerra del Pacífico. Ellas brindaron ayuda humanitaria y sanitaria, e incluso participaron directamente en combate. Desde 2022, este homenaje está establecido por la Ley N° 21.466.

La conmemoración coincide con la efeméride de la Batalla de Tarapacá, ocurrida en 1879, escenario donde muchas cantineras lucharon y se sacrificaron por el país. En este combate fallecieron tres de ellas: Leonor Solar, Rosa Ramírez y Susana Montenegro.

La primera mujer registrada en la Institución a la que se le puede atribuir el rol de cantinera es la Subteniente Candelaria Pérez. Durante la Guerra contra la Confederación Perú-Boliviana, cumplió funciones de enlace entre los buques chilenos que bloqueaban El Callao, por lo que fue arrestada por cargos de espionaje. Tras ser liberada, se integró al Regimiento Carampangue, donde cuidó heridos, realizó labores domésticas y participó en operaciones militares.

En la Guerra del Pacífico, muchas cantineras asumieron de manera natural el rol de atender a los enfermos y heridos. Sus motivaciones iban más allá del apoyo sanitario: las impulsaba el sentido del deber hacia los soldados y la patria, el orgullo de acompañar a los suyos en campaña y el anhelo de contribuir al fin del conflicto.

Tal era su determinación, que se conocen casos de dos cantineras que se vistieron como hombres y ocuparon cupos de soldados bajo identidades falsas. Tras ser descubiertas, fueron aceptadas en la unidad, reconociéndose su valor y decisión. Ellas fueron María Rojas Moya, cantinera del 4° de Línea —quien pasó lista como el soldado Pedro María Rojas Moya—, y la Cabo 2° Belarmina Josefa Herrera, también del 4° de Línea, con el nombre de José del Carmen Herrera.

La vida de las cantineras no difería de la de cualquier soldado. En combate, eran un blanco más: corrían tras las tropas para entregar agua, atender heridos o evacuarlos a un lugar seguro. Y, si era necesario, tomaban las armas de los caídos para defender a la patria.

Un caso especialmente conmovedor es el de María la chica, cantinera del 2° de Línea, de unos 20 años. Su cuerpo fue encontrado junto al del Capitán Garfías Fierro; la posición en que ambos yacían evidenciaba que María murió mientras intentaba atender al oficial, permaneciendo a su lado hasta el final.

También se recuerda a las cantineras que acompañaron a los 77 de La Concepción. Una de ellas llevaba consigo a un niño de cinco años, y otra dio a luz en medio del combate. Ambas alentaron y asistieron a los soldados hasta el último momento. Ni ellas ni el niño sobrevivieron.

La mayor parte de las cantineras desempeñó su labor de manera anónima, pero su aporte fue fundamental para el esfuerzo militar y humano de la época. El país les debe gratitud, pues formaban parte del Ejército de manera voluntaria y sin esperar recompensa.

Hoy, las mujeres continúan siendo esenciales en la Institución, cumpliendo diversos roles con la misma vocación de servicio y amor a la patria que caracterizó a las cantineras.


Fuente información: vinculacion.medios@ejercito.cl
Siguiente Anterior
*****