Un problema ajeno, pero que nos afecta
Por Juan Carlos S. Claret Pool, Colegio de Abogados de la Provincia de Osorno AG
Nuestra provincia, la de Osorno, si bien pertenece administrativamente a la Región de Los Lagos, para todos los efectos judiciales responde a la Corte de Apelaciones de Valdivia, la que conoce de todos los asuntos que ocurren en Los Ríos y en nuestra zona. Esta situación es excepcional en el territorio nacional, pues lo general es que una Corte conozca sobre toda una región.
Aunque me siento tentado a poner sobre la mesa una crítica al proceso de regionalización y a exponer razones de porqué nos hubiese convenido más formar parte de la Región de Los Ríos, quiero dedicar estas líneas a exponer un problema judicial con la Corte de Apelaciones de Puerto Montt lo que, si bien no formamos parte de su jurisdicción, está afectando el desarrollo de la región de la que sí somos integrantes.
Al respecto, es dable destacar que el tribunal de alzada puertomonttino tiene poco más de cincuenta años y, por disposición legal, cuenta con una dotación insuficiente para el volumen de causas que recibe y la población ajusticiable. Así, con cuatro ministros y una sala ordinaria, se espera que impartan justicia sobre una región extensa, con alta población y sede de una de las fuerzas productivas y lucrativas más relevantes para el país, como lo es la piscicultura y sus exportaciones. Si uno compara con otras jurisdicciones, esto es irregular.
Así, concretamente, asuntos que suelen resolverse en un mes, en la Corte de Apelaciones de Puerto Montt pueden demorar hasta 15 veces más. Al respecto, es evidente que retrasos de esa magnitud perjudican el acceso a la justicia y desincentivan proyectos de inversión. Y cualquiera sea el escenario, como provincia también perdemos aunque no integremos esa jurisdicción.
Por eso, si bien hay motivos para agradecer que pertenezcamos a otra Corte cuyos estándares de eficiencia y vanguardia son reconocidos a nivel país, no podemos desentendernos de un problema judicial que teniendo sede en Puerto Montt, nos afecta.
Por tales razones, esta semana los colegios de abogados de Osorno y Puerto Montt publicamos un llamado a los legisladores de nuestra región para propiciar una reforma en el Código Orgánico de Tribunales, que es la gran piedra de tope y por donde pasa la solución.
Nuestra provincia, la de Osorno, si bien pertenece administrativamente a la Región de Los Lagos, para todos los efectos judiciales responde a la Corte de Apelaciones de Valdivia, la que conoce de todos los asuntos que ocurren en Los Ríos y en nuestra zona. Esta situación es excepcional en el territorio nacional, pues lo general es que una Corte conozca sobre toda una región.
Aunque me siento tentado a poner sobre la mesa una crítica al proceso de regionalización y a exponer razones de porqué nos hubiese convenido más formar parte de la Región de Los Ríos, quiero dedicar estas líneas a exponer un problema judicial con la Corte de Apelaciones de Puerto Montt lo que, si bien no formamos parte de su jurisdicción, está afectando el desarrollo de la región de la que sí somos integrantes.
Al respecto, es dable destacar que el tribunal de alzada puertomonttino tiene poco más de cincuenta años y, por disposición legal, cuenta con una dotación insuficiente para el volumen de causas que recibe y la población ajusticiable. Así, con cuatro ministros y una sala ordinaria, se espera que impartan justicia sobre una región extensa, con alta población y sede de una de las fuerzas productivas y lucrativas más relevantes para el país, como lo es la piscicultura y sus exportaciones. Si uno compara con otras jurisdicciones, esto es irregular.
Así, concretamente, asuntos que suelen resolverse en un mes, en la Corte de Apelaciones de Puerto Montt pueden demorar hasta 15 veces más. Al respecto, es evidente que retrasos de esa magnitud perjudican el acceso a la justicia y desincentivan proyectos de inversión. Y cualquiera sea el escenario, como provincia también perdemos aunque no integremos esa jurisdicción.
Por eso, si bien hay motivos para agradecer que pertenezcamos a otra Corte cuyos estándares de eficiencia y vanguardia son reconocidos a nivel país, no podemos desentendernos de un problema judicial que teniendo sede en Puerto Montt, nos afecta.
Por tales razones, esta semana los colegios de abogados de Osorno y Puerto Montt publicamos un llamado a los legisladores de nuestra región para propiciar una reforma en el Código Orgánico de Tribunales, que es la gran piedra de tope y por donde pasa la solución.
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