Sigue retraso en obra de la PDI de Osorno: empresa que adjudicó desistió de su oferta
Su preocupación y disposición para que los trabajos del nuevo cuartel de la Policía de Investigaciones de Osorno (PDI) de Osorno, se retomen este año y no en 2019, luego que la obra fuera abandonada por la empresa Ingeproc en marzo de 2017, manifestó el consejero regional Francisco Reyes.
Reyes solicitó en el Consejo Regional un informe detallado de la etapa en que se encuentra la segunda adjudicación de los trabajos y cuyo plazo de vigencia de la oferta venció esta semana.
Este jueves el consejero regional fue informado por la unidad técnica de la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas que la empresa Capreva que licitó y adjudicó a comienzos de este año determinó desistir de la oferta, lo que pone en riesgo la inversión efectiva en el proyecto durante 2018.
Ello, porque según explicó Reyes, los escenarios posibles tomarán tiempo y seguirán retrasando un proceso que no ha tenido una articulación de todas las partes que se manifieste muy visible y eficaz.
“Estamos tremendamente preocupados porque la provincia de Osorno no puede perder la inversión de una obra emblemática, demandada desde 2012, que ha tenido una serie de fallas e intentos fallidos a la hora de construir o de licitar. Por ello, vamos a hacer todo lo posible desde el Consejo Regional para que todos los entes involucrados estén a la altura de esta urgencia. La PDI debe construirse o iniciar obra durante 2018”, dijo.
Según el consejero regional, el problema generado con la fallida adjudicación obliga a hacer una nueva licitación pública o reevaluar el proyecto con el Ministerio de Desarrollo Social (Mideso), lo que implicará conseguir más recursos en la misma PDI o en el Gobierno Regional.
“Nos preocupa porque solicitamos un informe en el Consejo Regional para que se nos cuente en qué etapa está la adjudicación e inicio de obra y se nos acaba de informar que la empresa que adjudicó desistió esta semana de asumir los trabajos, y por lo tanto nos quedan 2 nuevos escenarios: o reevaluar y solicitar más recursos, o hacer una nueva licitación pública lo que genera un golpe a la inversión porque no alcanzaríamos a gastar los recursos. Estamos en un plazo tope, de zona roja, para reiniciar los trabajamos que incrementarían la inversión de la provincia de Osorno”, agregó.
Según explicó el consejero, de haber buena articulación y una decisión rápida en cualquiera de los dos escenarios, recién entre octubre o noviembre de este año podría generar un estado de pago inicial, lo que ya resulta complejo.
Hasta ahora los trabajos implican una inversión de 7 mil 500 millones de pesos, de los que el Fondo Nacional de Desarrollo Regional aporta más del 50 por ciento. En caso de adjudicar a la empresa que ofertó y calificó en segundo lugar, Copcisa, la obra irá a reevaluación por el monto propuesto de casi 9 mil 400 millones de pesos.
Al no haber gasto para 2018, la inversión efectiva de Osorno disminuye notablemente, manteniéndose el territorio en materia de obras y presupuesto como el cuarto de 4 provincias de la Región de Los Lagos.
Este jueves el consejero regional fue informado por la unidad técnica de la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas que la empresa Capreva que licitó y adjudicó a comienzos de este año determinó desistir de la oferta, lo que pone en riesgo la inversión efectiva en el proyecto durante 2018.
Ello, porque según explicó Reyes, los escenarios posibles tomarán tiempo y seguirán retrasando un proceso que no ha tenido una articulación de todas las partes que se manifieste muy visible y eficaz.
“Estamos tremendamente preocupados porque la provincia de Osorno no puede perder la inversión de una obra emblemática, demandada desde 2012, que ha tenido una serie de fallas e intentos fallidos a la hora de construir o de licitar. Por ello, vamos a hacer todo lo posible desde el Consejo Regional para que todos los entes involucrados estén a la altura de esta urgencia. La PDI debe construirse o iniciar obra durante 2018”, dijo.
Según el consejero regional, el problema generado con la fallida adjudicación obliga a hacer una nueva licitación pública o reevaluar el proyecto con el Ministerio de Desarrollo Social (Mideso), lo que implicará conseguir más recursos en la misma PDI o en el Gobierno Regional.
“Nos preocupa porque solicitamos un informe en el Consejo Regional para que se nos cuente en qué etapa está la adjudicación e inicio de obra y se nos acaba de informar que la empresa que adjudicó desistió esta semana de asumir los trabajos, y por lo tanto nos quedan 2 nuevos escenarios: o reevaluar y solicitar más recursos, o hacer una nueva licitación pública lo que genera un golpe a la inversión porque no alcanzaríamos a gastar los recursos. Estamos en un plazo tope, de zona roja, para reiniciar los trabajamos que incrementarían la inversión de la provincia de Osorno”, agregó.
Según explicó el consejero, de haber buena articulación y una decisión rápida en cualquiera de los dos escenarios, recién entre octubre o noviembre de este año podría generar un estado de pago inicial, lo que ya resulta complejo.
Hasta ahora los trabajos implican una inversión de 7 mil 500 millones de pesos, de los que el Fondo Nacional de Desarrollo Regional aporta más del 50 por ciento. En caso de adjudicar a la empresa que ofertó y calificó en segundo lugar, Copcisa, la obra irá a reevaluación por el monto propuesto de casi 9 mil 400 millones de pesos.
Al no haber gasto para 2018, la inversión efectiva de Osorno disminuye notablemente, manteniéndose el territorio en materia de obras y presupuesto como el cuarto de 4 provincias de la Región de Los Lagos.
