Catalina quiere ser otra persona - Entiende Tu Cuerpo Podcast 13
Hola, soy la psicóloga Magdalena Mohr. Trabajo en mi consulta particular haciendo psicoterapia enfocada a trabajar el autoestima en mujeres. Me apasiona acompañar a mujeres a descubrirse y a ser la mejor amiga de si mismas.
Hoy veremos el caso de Catalina, una joven de 25 años que sufría de ansiedad y baja autoestima.
Catalina llegó a mi consulta con mucha energía y un profundo duelo. Se mezclaban su ansiedad y su dolor, muy reciente. Su pololo había decidido terminar la relación con ella, un mes atrás. La criticaba por ser muy inmadura y peleadora. Con cada palabra hacía un gesto, un movimiento y a veces, hasta gritaba. La calmé y luego siguió con su relato.
Me dijo que aún se sentía enamorada de su ex pareja y la ruptura le dolía tremendamente. Sintió resentimiento por él, a pesar de que reconoció que varias criticas que le hizo son ciertas. La ruptura le hizo dudar mucho de si misma; dijo sentirse "tonta, inmadura e inútil".
Muchas veces repitió sentirse fea. Se había cortado el pelo, comprado ropa nueva y estaba haciendo ejercicio para sentirse mas bonita. También había comenzado a estudiar guitarra, para sentirse más segura. Sentía esta urgencia por cambiar.
Simplemente quería ser otra persona.
Luchaba, en ese momento, por sentirse bien consigo misma, eso ocupaba todos sus pensamientos y energía. Pensaba que alimentando el sentimiento de minusvalía la haría mejorar. Si bien eso la movilizó a realizar algunos cambios, no la hizo sentir mejor.
Seguía ansiosa, hablando rápidamente de todos los planes que tenía. Parecía una metralleta. Su mirada era intranquila… buscaba soluciones rápidas. Quería un atajo.
Catalina vivía un cuadro ansioso con síntomas depresivos. El sentirse defectuosa y la autocrítica constante, la torturaba e impedía disfrutar su vida.
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Trata tu cuerpo como tratarías a alguien que amas
https://www.paislobo.cl/2019/06/psicologia-podcast.html
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Así, con este cuadro, iniciamos un proceso de psicoterapia. Lo primero que hice fue explicar a Catalina algunas cosas que me parecen esenciales para enfrentar un proceso de cambio. Porque hay cosas que queremos a toda costa.
Por ejemplo: - Tener un cuerpo atractivo - Tener un gran puesto de trabajo - Ganar mucho dinero - Tener un pololo - Tener más amigos
Esto a veces parece ser: - El camino a la felicidad - Un problema técnico - Algo que debe ocurrir por si mismo - Algo que se logra externamente - Algo sobre lo que no tenemos control
“Ningún cambio externo te hará feliz sin un cambio de mentalidad”., le dije. Te cuento a tí también, que me estás escuchando, como le dije a Catalina en su momento: el cambio de mentalidad es un trabajo interior que toma tiempo. A algunos menos que a otros, como en el caso de Catalina.
Los cambios se generan "de adentro hacia afuera", reitero este concepto. Ella podría buscar cosas que se enfocaran en un cambio más profundo. Se las enumeré y le dije:
- Conocerte mejor - Aprender a manejar tus emociones - Superar tus miedos - Atrever a expresarte - Ser más creativa - Encontrar una pasión - Tener más energía - Conectarte con otros - Generar hábitos que te mantengan sana - Ser más humilde - Ser más compasiva - Descansar mejor de noche - Sentirte cómoda con su cuerpo - Bajar los niveles de stress.
Es más fácil llegar a la meta con cambios chicos, que le dieran la posibilidad de hacerlo. Primero tuvo que construir el camino. Su camino. Son las cosas más chicas e "insignificantes" las que le permitieron cambiar su manera de enfrentar y resolver los problemas.
Es más realista y efectivo hablar de mejorar antes que cambiar. Entonces la llevé a que sintiera un momento de introspección, optimismo y energía.
Le dije: “¿Tú quieres cambiar? Necesitas partir con pequeños cambios que te permitan mejorar tu calidad de vida. Que tu motivación sea sentirte bien, que tu motivación no sea ser más exitosa o mas querible. Por ejemplo, piensa en el circulo virtuoso que generas si empiezas a hacer algo de deporte; dormirías mas profundo, tendrías más energía, mejor ánimo y menor ansiedad. Entonces se inscribió en clases de Crossfit. Después de la tercera clase se sintió muy agotada, argumentando que ese lugar no le gustaba. La motivación desapareció. Chao Crossfit. Mientras pensó en otra clase de actividad física, su indumentaria deportiva quedó esperando en el closet el minuto perfecto para ser usada.
Entrenó una vez con sus pesas, pero se sintió fraudulenta y despreció su intento. Comparado con las clases de Crossfit, sintió que con el ejercicio que hacía era una tortuga. Entonces, le ayudé a buscar una motivación interna para el cambio de HOY.
Sentir más energía, descansar mejor, sentirse más liviana. Pensar en los beneficios inmediatos que le daría ejercitarse. Por eso es importante y fundamental empezar de a poco. Pensar en chico, y plantearse metas probables de ser cumplidas. Empáticas con tu estilo de vida y dificultades.
Catalina se convirtió en una muy buena coach de si misma y logró los pequeños avances, que la hicieron sentir feliz.
Cuando algo cambia todo cambia. Comenzó a caminar 10 minutos diarios, y en un mes notó una gran diferencia. Le pregunté: ¿Estás hoy mejor que ayer? Sí, me contestó.
Había resultado el tratamiento.
Recuerda que lo que persigues es cierto estado emocional, no una acción concreta. Nada te asegura por ejemplo, que serás feliz al tener el trabajo que quieres. El camino de luchar por lo que quieres va generando un cambio de mentalidad que te permite disfrutar del resultado, como el de Catalina.
Compartí esta reflexión con Catalina porque necesitaba que entendiera que la incomodidad que sentía no mejoraría con cambios externos. Ella necesitaba conocerse y abrir un dialogo sincero consigo misma. Aceptarse y buscar mejorar desde el amor propio y deseo de autocuidado, y no desde la autocrítica. Este es el primer paso para empezar a conocerte, amarte y reconciliarte contigo misma. Como te puede estar pasando a ti, en este momento.
Hasta el próximo capítulo, en donde conocerán el caso de Daniela, quien se sentía estresada y ansiosa por no alcanzar sus metas y sentir un gran descontrol en su vida.
Fuente de la información: magdalena.mohr@gmail.com
Hoy veremos el caso de Catalina, una joven de 25 años que sufría de ansiedad y baja autoestima.
Catalina llegó a mi consulta con mucha energía y un profundo duelo. Se mezclaban su ansiedad y su dolor, muy reciente. Su pololo había decidido terminar la relación con ella, un mes atrás. La criticaba por ser muy inmadura y peleadora. Con cada palabra hacía un gesto, un movimiento y a veces, hasta gritaba. La calmé y luego siguió con su relato.
Me dijo que aún se sentía enamorada de su ex pareja y la ruptura le dolía tremendamente. Sintió resentimiento por él, a pesar de que reconoció que varias criticas que le hizo son ciertas. La ruptura le hizo dudar mucho de si misma; dijo sentirse "tonta, inmadura e inútil".
Muchas veces repitió sentirse fea. Se había cortado el pelo, comprado ropa nueva y estaba haciendo ejercicio para sentirse mas bonita. También había comenzado a estudiar guitarra, para sentirse más segura. Sentía esta urgencia por cambiar.
Simplemente quería ser otra persona.
Luchaba, en ese momento, por sentirse bien consigo misma, eso ocupaba todos sus pensamientos y energía. Pensaba que alimentando el sentimiento de minusvalía la haría mejorar. Si bien eso la movilizó a realizar algunos cambios, no la hizo sentir mejor.
Seguía ansiosa, hablando rápidamente de todos los planes que tenía. Parecía una metralleta. Su mirada era intranquila… buscaba soluciones rápidas. Quería un atajo.
Catalina vivía un cuadro ansioso con síntomas depresivos. El sentirse defectuosa y la autocrítica constante, la torturaba e impedía disfrutar su vida.
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Trata tu cuerpo como tratarías a alguien que amas
https://www.paislobo.cl/2019/06/psicologia-podcast.html
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Así, con este cuadro, iniciamos un proceso de psicoterapia. Lo primero que hice fue explicar a Catalina algunas cosas que me parecen esenciales para enfrentar un proceso de cambio. Porque hay cosas que queremos a toda costa.
Por ejemplo: - Tener un cuerpo atractivo - Tener un gran puesto de trabajo - Ganar mucho dinero - Tener un pololo - Tener más amigos
Esto a veces parece ser: - El camino a la felicidad - Un problema técnico - Algo que debe ocurrir por si mismo - Algo que se logra externamente - Algo sobre lo que no tenemos control
“Ningún cambio externo te hará feliz sin un cambio de mentalidad”., le dije. Te cuento a tí también, que me estás escuchando, como le dije a Catalina en su momento: el cambio de mentalidad es un trabajo interior que toma tiempo. A algunos menos que a otros, como en el caso de Catalina.
Los cambios se generan "de adentro hacia afuera", reitero este concepto. Ella podría buscar cosas que se enfocaran en un cambio más profundo. Se las enumeré y le dije:
- Conocerte mejor - Aprender a manejar tus emociones - Superar tus miedos - Atrever a expresarte - Ser más creativa - Encontrar una pasión - Tener más energía - Conectarte con otros - Generar hábitos que te mantengan sana - Ser más humilde - Ser más compasiva - Descansar mejor de noche - Sentirte cómoda con su cuerpo - Bajar los niveles de stress.
Es más fácil llegar a la meta con cambios chicos, que le dieran la posibilidad de hacerlo. Primero tuvo que construir el camino. Su camino. Son las cosas más chicas e "insignificantes" las que le permitieron cambiar su manera de enfrentar y resolver los problemas.
Es más realista y efectivo hablar de mejorar antes que cambiar. Entonces la llevé a que sintiera un momento de introspección, optimismo y energía.
Le dije: “¿Tú quieres cambiar? Necesitas partir con pequeños cambios que te permitan mejorar tu calidad de vida. Que tu motivación sea sentirte bien, que tu motivación no sea ser más exitosa o mas querible. Por ejemplo, piensa en el circulo virtuoso que generas si empiezas a hacer algo de deporte; dormirías mas profundo, tendrías más energía, mejor ánimo y menor ansiedad. Entonces se inscribió en clases de Crossfit. Después de la tercera clase se sintió muy agotada, argumentando que ese lugar no le gustaba. La motivación desapareció. Chao Crossfit. Mientras pensó en otra clase de actividad física, su indumentaria deportiva quedó esperando en el closet el minuto perfecto para ser usada.
Entrenó una vez con sus pesas, pero se sintió fraudulenta y despreció su intento. Comparado con las clases de Crossfit, sintió que con el ejercicio que hacía era una tortuga. Entonces, le ayudé a buscar una motivación interna para el cambio de HOY.
Sentir más energía, descansar mejor, sentirse más liviana. Pensar en los beneficios inmediatos que le daría ejercitarse. Por eso es importante y fundamental empezar de a poco. Pensar en chico, y plantearse metas probables de ser cumplidas. Empáticas con tu estilo de vida y dificultades.
Catalina se convirtió en una muy buena coach de si misma y logró los pequeños avances, que la hicieron sentir feliz.
Cuando algo cambia todo cambia. Comenzó a caminar 10 minutos diarios, y en un mes notó una gran diferencia. Le pregunté: ¿Estás hoy mejor que ayer? Sí, me contestó.
Había resultado el tratamiento.
Recuerda que lo que persigues es cierto estado emocional, no una acción concreta. Nada te asegura por ejemplo, que serás feliz al tener el trabajo que quieres. El camino de luchar por lo que quieres va generando un cambio de mentalidad que te permite disfrutar del resultado, como el de Catalina.
Compartí esta reflexión con Catalina porque necesitaba que entendiera que la incomodidad que sentía no mejoraría con cambios externos. Ella necesitaba conocerse y abrir un dialogo sincero consigo misma. Aceptarse y buscar mejorar desde el amor propio y deseo de autocuidado, y no desde la autocrítica. Este es el primer paso para empezar a conocerte, amarte y reconciliarte contigo misma. Como te puede estar pasando a ti, en este momento.
Hasta el próximo capítulo, en donde conocerán el caso de Daniela, quien se sentía estresada y ansiosa por no alcanzar sus metas y sentir un gran descontrol en su vida.
Fuente de la información: magdalena.mohr@gmail.com
