Placa conmemorativa para la "Escalera Abuelito Huenteyao" de Bahía Mansa

Destacan aporte del proyecto “Escalera Abuelito Huenteyao” de Bahía Mansa, como ganadora del Premio Aporte Urbano.

Este jueves 11 de noviembre se realizó una ceremonia en la “Escalera Abuelito Huenteyao” ubicada en Bahía Mansa, con el objetivo de instalar una placa conmemorativa que recuerda que esta obra fue la ganadora del Premio Aporte Urbano 2020 en la categoría Mejor Proyecto de Espacio Público Escala Barrial. La ceremonia fue presidida por el director del premio, Cristóbal Prado, y el presidente de la Cámara Chilena de la Construcción Osorno, Andrés Angulo; además contó con la participación del Seremi de Vivienda y Urbanismo, Jorge Guevara, el alcalde de San Juan de la Costa, Bernardo Candia, los concejales del municipio, dirigentes ciudadanos y vecinos del sector.

La “Escalera Abuelito Huenteyao” es una de las obras del Plan de Desarrollo de la Localidad de Bahía Mansa, que se enmarca en el Programa para Pequeñas Localidades del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, localidad que ha sido piloto desde el año 2016 en convenio con la municipalidad de San Juan de la Costa y Fundación Superación por la Pobreza.
Durante la ceremonia, el edil de la comuna comentó que este premio significaba un gran reconocimiento, pues la escalera aporta a la simbología con el que el lugar busca representar la cultura huilliche. “San Juan de la Costa posee una riqueza enorme en su población, y hemos tratado de relevarla con símbolos”, señaló Candia refiriéndose a las construcciones tales como la plaza, las garitas y esculturas que adornan el pueblo. Sobre el proyecto “Escalera Abuelito Huenteyao”, habló sobre la importancia de la materialidad para la identidad, agradeciendo al arquitecto, Cristian González, en sus palabras.

Cristóbal Prado, director del Premio Aporte Urbano, PAU, agregó: 

“Lo más importante de este proyecto es que recoge un símbolo muy local, que es esta escalera que durante años ha sido utilizada diariamente por la comunidad de Bahía Mansa y la recupera. Se trata de una obra que permite reconocer y dar continuidad a un lugar tradicional de esta localidad”.

Respecto a la relevancia del PAU, Andrés Angulo, líder gremial CChC señaló: 

“El PAU busca destacar aquellas obras que son un aporte a la calidad de vida de las diferentes comunidades. Buscando propuestas que vayan más allá de la mera solución funcional que cada obra debe resolver. La selección de este proyecto se destaca por que se reconoce con el la ‘levedad’ de la obra, se trata solo de una escalera de 328 peldaños, en una lejana localidad, periférica a toda centralidad. Su selección y posterior premio es evidencia de la ‘universalidad’ del PAU”. Sobre el proyecto conmemorado, Angulo recalcó la escalera como la primera pública de Bahía Mansa.

Sobre el proyecto

La obra, que fue diseñada por el arquitecto Cristián González y desarrollada por la Constructora Axial LTDA, cuenta con una superficie de 826.85 m2 y está compuesta por 329 peldaños que han permitido dignificar la movilidad peatonal en el territorio.

De acuerdo a la memoria del proyecto: 

“La leyenda cuenta que el Abuelito Huenteyao era un habitante más de la localidad, hombre de mar que se queda en una gran roca para proteger a su pueblo, se transforma en un ser divino que representa el bien en la cultura o cosmovisión huilliche, quien protege e intercede ante el Chaotroquin, dueño del mar y que vive en el territorio de Pucatrihue en Sruka Kura. La importancia de este ser que forma parte del patrimonio del pueblo en Bahía Mansa, localidad que se caracteriza por tener más del 80% de la población Mapuche – Huilliche, da el nombre a esta importante obra relevante en la configuración de la trama urbana”.

Concretamente, la escalera desciende en 75 metros de altura, comienza en la culminación del pasaje El Canillo, en un mirador desde la parte más alta con una imponente vista al muelle y explanada, descendiendo hasta el sector de playa de Bahía Mansa. Comprende una longitud de 207 metros dividida en dos tramos y un ancho aproximado de 2 metros, el diseño reconoce la oportunidad de los descansos y genera miradores cubiertos, espacios de contemplación en su recorrido, iluminación con paneles solares libres de contaminación, un diseño adecuado en evacuación de aguas lluvias y la protección de erosión de las laderas mediante tratamiento vegetal y en algunos casos contención tipo schocret para evitar desmoronamiento en algunos sectores.




Fuente: comunicaciones.osorno@cchc.cl