Israel se prepara para una posible ofensiva terrestre en el Líbano
Según lo informado por la agencia EFE, el conflicto en la frontera entre Israel y el Líbano continúa escalando, con el ejército israelí dando señales claras de una posible incursión terrestre en territorio libanés. Este miércoles, el Jefe del Estado Mayor israelí, Herzi Halevi, informó que los recientes bombardeos aéreos en el sur del Líbano están preparando el terreno para una ofensiva terrestre destinada a desmantelar la infraestructura del grupo chiita Hezbollah, respaldado por Irán.
En un movimiento estratégico que acerca a Israel a una temida incursión en el Líbano, dos brigadas de soldados reservistas fueron convocadas para realizar misiones operativas en la frontera. Según Halevi, la posible maniobra militar consistiría en adentrarse en localidades del sur del Líbano, que Hezbollah ha convertido en una base militar, con el fin de destruir la infraestructura del grupo en la región.
Israel intensificó su campaña de bombardeos el lunes, concentrándose en el sur y este del Líbano. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) afirman que los ataques están dirigidos a destruir cohetes y misiles que Hezbollah esconde en zonas civiles, desde donde han lanzado ataques contra el territorio israelí. Este miércoles, los bombardeos alcanzaron 60 objetivos estratégicos, incluyendo cuarteles y centros de inteligencia utilizados por el grupo libanés.
Hezbollah, el grupo chiita libanés aliado de Irán, ha intensificado sus ataques en respuesta a los bombardeos israelíes, expandiendo sus acciones hacia puntos más alejados de la frontera. En la madrugada del miércoles, las sirenas de alerta sonaron en varias ciudades israelíes, incluida Tel Aviv, tras el lanzamiento de un misil de largo alcance desde el Líbano. Este proyectil fue interceptado por el sistema de defensa israelí, evitando mayores daños en la ciudad.
El conflicto entre Israel y Hezbollah ha dejado un saldo trágico de más de 700 fallecidos, la mayoría en el lado libanés. Hezbollah ha confirmado 455 bajas en sus filas desde que se intensificaron los enfrentamientos. Por su parte, en Israel se han registrado 52 muertes, entre las que se cuentan 26 militares y 26 civiles, incluidos 12 menores de edad, en un ataque ocurrido en los Altos del Golán, un territorio sirio ocupado por Israel.
Este conflicto pone nuevamente en el centro de atención la ya inestable situación en Medio Oriente, con el riesgo de que una ofensiva terrestre de Israel en el sur del Líbano pueda desencadenar una escalada mayor en la región. Hezbollah, considerado una organización terrorista por Israel, ha sido uno de los principales actores en la resistencia contra las fuerzas israelíes en anteriores conflictos.
El apoyo de Irán a Hezbollah, tanto en términos de financiamiento como de armamento, añade una complejidad adicional a la situación, aumentando las tensiones no solo entre Israel y Líbano, sino también con otros actores regionales.
A medida que la posibilidad de una incursión terrestre se convierte en una realidad más cercana, la comunidad internacional sigue con atención el desarrollo del conflicto. La ONU y diversas organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por el número creciente de víctimas civiles, especialmente en el Líbano, y han instado a ambas partes a buscar una solución diplomática para evitar una mayor escalada del conflicto.
Sin embargo, la acumulación de tropas en la frontera y la intensificación de los ataques parecen indicar que una resolución pacífica podría no estar en el horizonte inmediato.
Fuente información: EFE
Preparativos para una ofensiva terrestre
En un movimiento estratégico que acerca a Israel a una temida incursión en el Líbano, dos brigadas de soldados reservistas fueron convocadas para realizar misiones operativas en la frontera. Según Halevi, la posible maniobra militar consistiría en adentrarse en localidades del sur del Líbano, que Hezbollah ha convertido en una base militar, con el fin de destruir la infraestructura del grupo en la región.
Israel intensificó su campaña de bombardeos el lunes, concentrándose en el sur y este del Líbano. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) afirman que los ataques están dirigidos a destruir cohetes y misiles que Hezbollah esconde en zonas civiles, desde donde han lanzado ataques contra el territorio israelí. Este miércoles, los bombardeos alcanzaron 60 objetivos estratégicos, incluyendo cuarteles y centros de inteligencia utilizados por el grupo libanés.
Hezbollah responde con más ataques
Hezbollah, el grupo chiita libanés aliado de Irán, ha intensificado sus ataques en respuesta a los bombardeos israelíes, expandiendo sus acciones hacia puntos más alejados de la frontera. En la madrugada del miércoles, las sirenas de alerta sonaron en varias ciudades israelíes, incluida Tel Aviv, tras el lanzamiento de un misil de largo alcance desde el Líbano. Este proyectil fue interceptado por el sistema de defensa israelí, evitando mayores daños en la ciudad.
Pérdidas humanas en aumento
El conflicto entre Israel y Hezbollah ha dejado un saldo trágico de más de 700 fallecidos, la mayoría en el lado libanés. Hezbollah ha confirmado 455 bajas en sus filas desde que se intensificaron los enfrentamientos. Por su parte, en Israel se han registrado 52 muertes, entre las que se cuentan 26 militares y 26 civiles, incluidos 12 menores de edad, en un ataque ocurrido en los Altos del Golán, un territorio sirio ocupado por Israel.
Escenario regional tenso
Este conflicto pone nuevamente en el centro de atención la ya inestable situación en Medio Oriente, con el riesgo de que una ofensiva terrestre de Israel en el sur del Líbano pueda desencadenar una escalada mayor en la región. Hezbollah, considerado una organización terrorista por Israel, ha sido uno de los principales actores en la resistencia contra las fuerzas israelíes en anteriores conflictos.
El apoyo de Irán a Hezbollah, tanto en términos de financiamiento como de armamento, añade una complejidad adicional a la situación, aumentando las tensiones no solo entre Israel y Líbano, sino también con otros actores regionales.
El futuro de la crisis
A medida que la posibilidad de una incursión terrestre se convierte en una realidad más cercana, la comunidad internacional sigue con atención el desarrollo del conflicto. La ONU y diversas organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por el número creciente de víctimas civiles, especialmente en el Líbano, y han instado a ambas partes a buscar una solución diplomática para evitar una mayor escalada del conflicto.
Sin embargo, la acumulación de tropas en la frontera y la intensificación de los ataques parecen indicar que una resolución pacífica podría no estar en el horizonte inmediato.
Fuente información: EFE
