Puertomontino fue secuestrado en Colombia: Estuvo una semana cautivo y su familia pagó rescate
Un empresario chileno, oriundo de la ciudad de Puerto Montt e identificado con el alias de "Gonzalo" por motivos de seguridad, fue víctima de un secuestro extorsivo en Colombia a principios de abril de este año. El ejecutivo, de 37 años, viajó al país cafetero con la intención de concretar un negocio relacionado con una línea de buses, pero fue interceptado y retenido durante una semana por un grupo de individuos que se identificaron como miembros de una guerrilla. Su liberación se produjo tras el pago de un rescate equivalente a tres millones de pesos chilenos. Los detalles de este angustiante suceso fueron dados a conocer este miércoles 4 de junio en un reportaje emitido por Canal 13. La investigación involucró la coordinación de la Fiscalía Regional de Los Lagos, el OS9 de Carabineros y sus pares en Colombia.
Un viaje de negocios que prometía la expansión de sus emprendimientos se transformó en la peor pesadilla para "Gonzalo", un empresario chileno de 37 años con residencia en el sur del país. Lo que comenzó como una prometedora sociedad para una línea de buses en Colombia, terminó con una semana de cautiverio a manos de un grupo armado que exigió un millonario rescate por su liberación. La información, mantenida en estricta reserva hasta ahora por razones de seguridad de la víctima y su familia, fue revelada anoche por el programa "Reportajes T13".
La historia comenzó a gestarse en julio del año pasado, cuando "Gonzalo" conoció a un ciudadano panameño, de nombre Kevin, con quien exploró la posibilidad de establecer una sociedad. Las conversaciones avanzaron y ambos acordaron cerrar el trato en Colombia, donde Kevin ya se encontraba. Así, el 1 de abril, "Gonzalo" emprendió viaje en bus desde Puerto Montt hacia Santiago, para luego, el 3 del mismo mes, volar con destino a Cali, previa escala en Bogotá. Arribó a la ciudad colombiana alrededor de las 11 de la noche.
Según el reportaje, al día siguiente de su llegada, el 4 de abril, "Gonzalo" salió del hotel donde se hospedaba, momento que fue captado por cámaras de seguridad. Se reunió con su socio Kevin en el centro de Cali con la intención de dirigirse al supuesto campo del panameño, ubicado a unas tres horas de la ciudad. Tras avanzar unos 140 kilómetros y llegar a la zona de Popayán, al sur de Colombia, fueron interceptados.
En su declaración a la policía, "Gonzalo" relató el dramático momento: "Sorprendentemente apareció una camioneta de color blanca opaca, similar a la que nos movilizamos, descendiendo tres sujetos con vestimentas oscuras, todos con capuchas y pistolas, llegando dos donde se encontraba Kevin y uno donde me encontraba yo, tomándonos y obligándonos a abordar la camioneta".
Tras una hora de trayecto, fueron llevados a una cabaña descrita por la víctima como una "ruca de madera". Allí, le cambiaron la ropa y, tras quitarle la capucha, observó a "seis sujetos, todos con armamento, cinco con pistolas y uno con un fusil 5.56". En ese instante le comunicaron: "Te vamos a tener detenido hasta que paguen tu liberación". Los captores, que según el testimonio del afectado se identificaron como "la guerrilla", le hicieron desbloquear su teléfono celular y comenzaron a realizar llamadas extorsivas. "También me consultaron a qué me dedicaba, en donde les señalé que tenía animales y un bus, como también un predio en Pucón avaluado en 150 millones de pesos. Eso les dije para que se pudieran vender rápido y pagaran por mi rescate", detalló "Gonzalo" en su declaración.
Mientras esto ocurría en Colombia, a casi 7.000 kilómetros de distancia, en la ciudad de Frutillar, su esposa comenzó a recibir las llamadas y mensajes exigiendo el pago. Inmediatamente, la mujer interpuso la denuncia ante Carabineros de Chile, activándose un operativo que fue catalogado como prioritario por el Departamento OS9 y la Fiscalía Regional de Los Lagos.
Desde la Fiscalía Nacional, se confirmó que, al tomar conocimiento de la privación de libertad de la víctima en Colombia, "se activaron todos los canales de comunicación a efectos de asegurar por un lado que se pudiese iniciar la investigación en Colombia respecto de estos hechos, pero además también de que en el caso de que se recuperara esta persona con vida, que fue lo que pasó, pudiese venir a Chile con las medidas de protección que correspondía".
El OS9 de Carabineros, por su parte, indicó que, "al acreditar que el secuestro fue en el extranjero, las primeras diligencias se realizan en conjunto con el equipo Gaula (de Colombia), dado que la víctima había sido secuestrada en Colombia". Este trabajo conjunto incluyó "la contención y una negociación indirecta donde actúa con la denunciante".
Los secuestradores ejercieron una fuerte presión sobre la familia. En uno de los llamados revelados, se escucha a un captor decir: "Reúna $3.000 para hoy. Para hoy. Y lo dejamos ir hoy a él". También profirieron amenazas: "La gente mentirosa lo llamó era matar, ¿me entienden? Pero yo veo que tienen sus hijos, su mujer que lo quieren, pues eso no se puede quedar así". Ante la insistencia de la esposa por una prueba de vida, los delincuentes se negaron: "Yo no le voy a mandar fotos. Cuando usted me mande los $3.000, le hago una videollamada para que usted mire a su marido que está bien".
Finalmente, la familia logró reunir una suma equivalente a tres millones de pesos chilenos (aproximadamente los $3.000 dólares solicitados), los cuales fueron enviados el 11 de abril a través de una empresa de servicios financieros internacionales. Con el dinero en su poder, los secuestradores cumplieron su palabra. "El día viernes me dijeron que me iban a soltar. Ahí hicieron que abordara la camioneta nuevamente, colocándome una capucha, trasladándome cerca de un pueblo llamado Timbío, como a unos 15 km. Me dejaron en ese lugar y me dijeron que no mirara hasta unos minutos que ellos se fueran. Posteriormente comencé a caminar hasta llegar a una casa y me indicaron hacia dónde quedaba el terminal", narró "Gonzalo".
Una vez en Cali, se reunió con la policía colombiana, donde recibió colaboración y se activaron los protocolos para su repatriación, la cual se concretó a mediados de abril en completo hermetismo. Una fotografía de "Gonzalo" ya a salvo fue la señal para los investigadores en Chile de que la víctima regresaba con vida.
Desde la Fiscalía chilena se enfatizó la gravedad de estos hechos, señalando que "rescatar a una persona que está privada de libertad en otro país es probablemente una de las circunstancias vitales más trágicas y por tanto el Estado no puede quedar inerme y tiene que trabajar intensamente como afortunadamente pasó en este caso".
Aunque la Fiscalía de Colombia declinó entregar una versión oficial para el reportaje de Canal 13, se indicó que la investigación sobre los captores sigue en curso. Existe la sospecha de que este grupo podría estar vinculado a otros secuestros extorsivos en la zona, incluyendo el de otro extranjero que llevaría un mes en cautiverio en Colombia. Este caso subraya los riesgos asociados a ciertos negocios en el extranjero y la importancia de la cooperación policial y judicial internacional.
Fuente información: https://www.t13.cl/noticia/nacional/una-semana-cautivo-empresario-chileno-puerto-montt-fue-secuestrado-colombia-4-6-2025
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Un viaje de negocios que prometía la expansión de sus emprendimientos se transformó en la peor pesadilla para "Gonzalo", un empresario chileno de 37 años con residencia en el sur del país. Lo que comenzó como una prometedora sociedad para una línea de buses en Colombia, terminó con una semana de cautiverio a manos de un grupo armado que exigió un millonario rescate por su liberación. La información, mantenida en estricta reserva hasta ahora por razones de seguridad de la víctima y su familia, fue revelada anoche por el programa "Reportajes T13".
La historia comenzó a gestarse en julio del año pasado, cuando "Gonzalo" conoció a un ciudadano panameño, de nombre Kevin, con quien exploró la posibilidad de establecer una sociedad. Las conversaciones avanzaron y ambos acordaron cerrar el trato en Colombia, donde Kevin ya se encontraba. Así, el 1 de abril, "Gonzalo" emprendió viaje en bus desde Puerto Montt hacia Santiago, para luego, el 3 del mismo mes, volar con destino a Cali, previa escala en Bogotá. Arribó a la ciudad colombiana alrededor de las 11 de la noche.
Según el reportaje, al día siguiente de su llegada, el 4 de abril, "Gonzalo" salió del hotel donde se hospedaba, momento que fue captado por cámaras de seguridad. Se reunió con su socio Kevin en el centro de Cali con la intención de dirigirse al supuesto campo del panameño, ubicado a unas tres horas de la ciudad. Tras avanzar unos 140 kilómetros y llegar a la zona de Popayán, al sur de Colombia, fueron interceptados.
En su declaración a la policía, "Gonzalo" relató el dramático momento: "Sorprendentemente apareció una camioneta de color blanca opaca, similar a la que nos movilizamos, descendiendo tres sujetos con vestimentas oscuras, todos con capuchas y pistolas, llegando dos donde se encontraba Kevin y uno donde me encontraba yo, tomándonos y obligándonos a abordar la camioneta".
Tras una hora de trayecto, fueron llevados a una cabaña descrita por la víctima como una "ruca de madera". Allí, le cambiaron la ropa y, tras quitarle la capucha, observó a "seis sujetos, todos con armamento, cinco con pistolas y uno con un fusil 5.56". En ese instante le comunicaron: "Te vamos a tener detenido hasta que paguen tu liberación". Los captores, que según el testimonio del afectado se identificaron como "la guerrilla", le hicieron desbloquear su teléfono celular y comenzaron a realizar llamadas extorsivas. "También me consultaron a qué me dedicaba, en donde les señalé que tenía animales y un bus, como también un predio en Pucón avaluado en 150 millones de pesos. Eso les dije para que se pudieran vender rápido y pagaran por mi rescate", detalló "Gonzalo" en su declaración.
Mientras esto ocurría en Colombia, a casi 7.000 kilómetros de distancia, en la ciudad de Frutillar, su esposa comenzó a recibir las llamadas y mensajes exigiendo el pago. Inmediatamente, la mujer interpuso la denuncia ante Carabineros de Chile, activándose un operativo que fue catalogado como prioritario por el Departamento OS9 y la Fiscalía Regional de Los Lagos.
Desde la Fiscalía Nacional, se confirmó que, al tomar conocimiento de la privación de libertad de la víctima en Colombia, "se activaron todos los canales de comunicación a efectos de asegurar por un lado que se pudiese iniciar la investigación en Colombia respecto de estos hechos, pero además también de que en el caso de que se recuperara esta persona con vida, que fue lo que pasó, pudiese venir a Chile con las medidas de protección que correspondía".
El OS9 de Carabineros, por su parte, indicó que, "al acreditar que el secuestro fue en el extranjero, las primeras diligencias se realizan en conjunto con el equipo Gaula (de Colombia), dado que la víctima había sido secuestrada en Colombia". Este trabajo conjunto incluyó "la contención y una negociación indirecta donde actúa con la denunciante".
Los secuestradores ejercieron una fuerte presión sobre la familia. En uno de los llamados revelados, se escucha a un captor decir: "Reúna $3.000 para hoy. Para hoy. Y lo dejamos ir hoy a él". También profirieron amenazas: "La gente mentirosa lo llamó era matar, ¿me entienden? Pero yo veo que tienen sus hijos, su mujer que lo quieren, pues eso no se puede quedar así". Ante la insistencia de la esposa por una prueba de vida, los delincuentes se negaron: "Yo no le voy a mandar fotos. Cuando usted me mande los $3.000, le hago una videollamada para que usted mire a su marido que está bien".
Finalmente, la familia logró reunir una suma equivalente a tres millones de pesos chilenos (aproximadamente los $3.000 dólares solicitados), los cuales fueron enviados el 11 de abril a través de una empresa de servicios financieros internacionales. Con el dinero en su poder, los secuestradores cumplieron su palabra. "El día viernes me dijeron que me iban a soltar. Ahí hicieron que abordara la camioneta nuevamente, colocándome una capucha, trasladándome cerca de un pueblo llamado Timbío, como a unos 15 km. Me dejaron en ese lugar y me dijeron que no mirara hasta unos minutos que ellos se fueran. Posteriormente comencé a caminar hasta llegar a una casa y me indicaron hacia dónde quedaba el terminal", narró "Gonzalo".
Una vez en Cali, se reunió con la policía colombiana, donde recibió colaboración y se activaron los protocolos para su repatriación, la cual se concretó a mediados de abril en completo hermetismo. Una fotografía de "Gonzalo" ya a salvo fue la señal para los investigadores en Chile de que la víctima regresaba con vida.
Desde la Fiscalía chilena se enfatizó la gravedad de estos hechos, señalando que "rescatar a una persona que está privada de libertad en otro país es probablemente una de las circunstancias vitales más trágicas y por tanto el Estado no puede quedar inerme y tiene que trabajar intensamente como afortunadamente pasó en este caso".
Aunque la Fiscalía de Colombia declinó entregar una versión oficial para el reportaje de Canal 13, se indicó que la investigación sobre los captores sigue en curso. Existe la sospecha de que este grupo podría estar vinculado a otros secuestros extorsivos en la zona, incluyendo el de otro extranjero que llevaría un mes en cautiverio en Colombia. Este caso subraya los riesgos asociados a ciertos negocios en el extranjero y la importancia de la cooperación policial y judicial internacional.
Fuente información: https://www.t13.cl/noticia/nacional/una-semana-cautivo-empresario-chileno-puerto-montt-fue-secuestrado-colombia-4-6-2025
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