Detienen a tres cabos del Ejército y un civil por retirar encomienda con drogas
Un operativo conjunto entre la Fiscalía Metropolitana Occidente y la Brigada Antinarcóticos de la PDI culminó este sábado con la detención de tres cabos activos del Ejército y un civil. Los individuos fueron aprehendidos al momento de retirar un paquete con más de un kilo de droga en una oficina de paquetería en Puerto Aysén, en la Región de Aysén. El hecho se suma a una serie de casos recientes que involucran a miembros de las Fuerzas Armadas con el tráfico de estupefacientes.
Tres cabos del Ejército de Chile, pertenecientes al Regimiento N°8 “Chiloé”, y un civil fueron detenidos durante la jornada de este sábado 16 de agosto en un operativo de la Policía de Investigaciones (PDI) en Puerto Aysén. La aprehensión se realizó en el momento en que los sujetos retiraban una encomienda con una cantidad indeterminada de droga.
Según los datos preliminares de la investigación, la encomienda contenía más de un kilo de sustancias ilícitas, aunque algunos reportes de prensa no confirmados oficialmente sugieren que la cantidad podría alcanzar hasta los 11 kilos. Los cuatro detenidos fueron trasladados de inmediato a las dependencias de la PDI en Coyhaique, donde permanecen a la espera de la audiencia de control de detención, la cual está programada para el domingo 17 de agosto.
El procedimiento estuvo a cargo de la Fiscalía Metropolitana Occidente y la Brigada Antinarcóticos del Aeropuerto de la PDI, que actuaron tras una investigación previa que permitió vigilar la entrega de la encomienda y concretar la detención al momento del retiro. La investigación se mantiene en desarrollo, bajo la supervisión del fiscal de Pudahuel, Daniel Contreras, y aún no se ha determinado la tipificación definitiva de los cargos ni las posibles vinculaciones con redes de crimen organizado.
Desde la institución militar, la IV División del Ejército confirmó la detención de sus funcionarios a través de un comunicado oficial. En el texto, la entidad "reitera su compromiso con el cumplimiento de la legalidad vigente y su plena colaboración con las autoridades competentes en el desarrollo de las diligencias para el esclarecimiento de los hechos". Además, la institución rechazó cualquier tipo de actividad ilícita.
Este caso se suma a una preocupante serie de eventos recientes, lo que refuerza la inquietud por la infiltración de redes de narcotráfico en las Fuerzas Armadas chilenas. Días atrás, seis soldados de la Segunda Brigada Acorazada fueron detenidos en la zona norte del país por hechos similares, y existen otras investigaciones abiertas que involucran a personal militar en el tráfico de drogas.
Fuente información: Agencia MI
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Tres cabos del Ejército de Chile, pertenecientes al Regimiento N°8 “Chiloé”, y un civil fueron detenidos durante la jornada de este sábado 16 de agosto en un operativo de la Policía de Investigaciones (PDI) en Puerto Aysén. La aprehensión se realizó en el momento en que los sujetos retiraban una encomienda con una cantidad indeterminada de droga.
Según los datos preliminares de la investigación, la encomienda contenía más de un kilo de sustancias ilícitas, aunque algunos reportes de prensa no confirmados oficialmente sugieren que la cantidad podría alcanzar hasta los 11 kilos. Los cuatro detenidos fueron trasladados de inmediato a las dependencias de la PDI en Coyhaique, donde permanecen a la espera de la audiencia de control de detención, la cual está programada para el domingo 17 de agosto.
El procedimiento estuvo a cargo de la Fiscalía Metropolitana Occidente y la Brigada Antinarcóticos del Aeropuerto de la PDI, que actuaron tras una investigación previa que permitió vigilar la entrega de la encomienda y concretar la detención al momento del retiro. La investigación se mantiene en desarrollo, bajo la supervisión del fiscal de Pudahuel, Daniel Contreras, y aún no se ha determinado la tipificación definitiva de los cargos ni las posibles vinculaciones con redes de crimen organizado.
Desde la institución militar, la IV División del Ejército confirmó la detención de sus funcionarios a través de un comunicado oficial. En el texto, la entidad "reitera su compromiso con el cumplimiento de la legalidad vigente y su plena colaboración con las autoridades competentes en el desarrollo de las diligencias para el esclarecimiento de los hechos". Además, la institución rechazó cualquier tipo de actividad ilícita.
Este caso se suma a una preocupante serie de eventos recientes, lo que refuerza la inquietud por la infiltración de redes de narcotráfico en las Fuerzas Armadas chilenas. Días atrás, seis soldados de la Segunda Brigada Acorazada fueron detenidos en la zona norte del país por hechos similares, y existen otras investigaciones abiertas que involucran a personal militar en el tráfico de drogas.
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