Reporte desde Nueva Zelanda: Erupción del Volcán Tongariro

Gonzalo Mardones Rivera, Corresponsal País Lobo, Dunedin, Nueva Zelanda.

Por más de 300 millones de años estuvimos unidos compartiendo el continente de Gondwana, hasta que hace unos 180 millones de años atrás comenzó una lenta separación. Las mismas fuerzas que en ese entonces nos fueron distanciando, siempre nos recuerdan nuestra unión en el pasado. Hace unos días atrás hizo erupción el volcán Tongariro en la isla norte de Nueva Zelanda, tal cual han hecho erupción muchos de nuestros volcanes en Chile: Chaitén, el cordón del Caulle.

Somo parte del cinturón de fuego del Pacífico, que ha modelado los hermosos paisajes de Chile y Nueva Zelanda, pero que también nos recuerdan lo vulnerables que somos ante las fuerzas de la naturaleza. Fue una sorpresa para muchos, pues el volcán Tongariro estaba dormido desde hace más de 100 años, tal cual el Caulle llevaba 50 años de inactividad y la sorpresa mayor del Chaitén con cerca de 8 mil años sin actividad. Este corresponsal estuvo hace tres años recorriendo uno de los senderos del Parque Nacional Tongariro, admirando el majestoso paisaje y disfrutando de sus excelentes instalaciones para practicar el senderismo.

Me sorprendió el gran número de personas, familias y delegaciones de estudiantes que recorrían el lugar, para lo cual debían realizar una caminata de más de 5 horas con ascensos extenuantes, pero con vistas privilegiadas. Es cierto, Nueva Zelanda es un país desarrollado, pero que bien nos haría a los chilenos que nuestras familias y escolares pudieran salir más a menudo a la cordillera, no sólo para disfrutar de sus paisajes, sino también para aprender de la montaña. Vivimos con la Cordillera de los Andes a nuestras espaldas, dándole más tiempo a la vida citadina y a los Malls.

Quizás de esa manera, no nos sorprendería tanto cuando cualquiera de los varios volcanes de la provincia de Osorno (Caulle, Puyehue, Casablanca, Antillanca, Puntiagudo, Cenizo, La Picada, Osorno) hiciera erupción y sepamos cómo actuar en caso de una emergencia como la del Volcán Tongariro en Nueva Zelanda.