Gobernador Santana impulsa un giro radical en el GORE Los Lagos
El Gobernador de la Región de Los Lagos, Alejandro Santana, anunció un cambio estructural en el funcionamiento del Gobierno Regional (GORE), con el objetivo de pasar de un rol predominantemente financiero de proyectos ministeriales a una entidad ejecutora que diseñe, administre y mida el impacto de sus propias políticas públicas. La reforma, que busca revertir la proporción actual del gasto, establecerá nuevas exigencias técnicas en áreas clave como salud y seguridad, y se implementará progresivamente a partir de este año, marcando un precedente en la autonomía regional y la eficiencia del gasto público.
Un cambio de paradigma "en 180 grados". Así definió el Gobernador de la Región de Los Lagos, Alejandro Santana, la transformación que está impulsando en el modelo de gestión del Gobierno Regional (GORE). En entrevista con Paislobo Prensa, la autoridad detalló su plan para que el GORE deje de actuar principalmente como una "institución financiera" que traspasa fondos a los ministerios y se convierta en un ente creador y ejecutor de sus propias políticas, basadas en las necesidades y prioridades de la región.
El diagnóstico que motiva esta reforma es contundente. Según cifras presentadas por Santana, al asumir su cargo se encontró con un escenario complejo: por primera vez en ocho años, el presupuesto regional arrastraba una "deuda flotante" y, para 2025, la región cuenta con el presupuesto más bajo de los últimos nueve años. A esto se suma que recibió el GORE con un 78% de sus recursos comprometidos para los próximos cuatro años.
Un análisis más profundo de esos compromisos reveló el nudo del problema: el 72% de dichos proyectos corresponden a iniciativas ministeriales, mientras que solo un 28% son políticas propias del GORE, como los Fondos Regionales de Inversión Local (FRIL) o programas comunitarios. "El rol del gobierno regional ha sido mayoritariamente un rol financiero. Llegan los ministerios y le dicen: 'oiga, señor gobierno regional, financien ustedes'", explicó Santana, atribuyendo esta dinámica a una "inercia" de la época de los intendentes designados por el poder central.
El objetivo de la nueva administración es invertir esa proporción: que al final de su período, el 70% de los recursos financien programas propios del GORE y solo el 30% se destine a iniciativas sectoriales ministeriales. "Si no lo logramos, cerremos la puerta por fuera y volvamos al intendente", sentenció la autoridad, subrayando la necesidad de dotar de contenido real a la descentralización.
Para materializar este cambio, el GORE está creando unidades técnicas especializadas en áreas como infraestructura, salud y seguridad. En materia de salud, Santana ejemplificó que actualmente el GORE financia 22 programas distintos de los Servicios de Salud, pero sin tener control sobre los resultados ni la gestión. "Cuando le preguntan al gobierno regional, ¿cuál ha sido el resultado? El gobierno regional dice: no lo sé", admitió.
A partir de 2026, el modelo cambiará drásticamente. El GORE diseñará sus propios programas de salud, basados en la prevalencia de enfermedades en la región, y los Servicios de Salud, municipios o incluso clínicas privadas podrán postular para ser los "prestadores" de dichos programas. "El programa es del gobierno regional, quien monitorea el programa es el gobierno regional", enfatizó Santana.
En seguridad pública, el enfoque será similar. El gobernador reveló que, aunque el GORE ha financiado "dos de cada tres pesos" en esta materia entre 2018 y 2024, una evaluación con las policías y la Fiscalía determinó que entre un 30% y un 40% de esos fondos "no sirven para nada", principalmente por la compra de tecnología inadecuada, como cámaras de vigilancia que son hackeables o no tienen la resolución necesaria para ser usadas como medio de prueba.
Para corregirlo, el próximo 7 de julio se lanzará la nueva política de financiamiento en seguridad del GORE. A partir de entonces, cualquier municipio que postule a fondos de seguridad deberá cumplir con requisitos estrictos: tener su plan de seguridad comunal actualizado, presentar informes técnicos de las policías que validen el equipamiento a adquirir y se otorgarán puntajes adicionales a las comunas que fiscalicen eficientemente las patentes de alcoholes y los juegos ilegales.
La nueva doctrina de gestión también incluye un sistema de incentivos para las 30 comunas de la región. Santana anunció que los municipios que demuestren mayor eficiencia en la formulación y ejecución de proyectos, como los FRIL, podrán optar a más recursos de manera automática. "El concepto de la eficiencia también va a tener un factor de incidencia en los recursos que nosotros vamos a asignar", afirmó, buscando así modernizar la gestión municipal.
Paralelamente, se está invirtiendo en tecnología para aumentar la transparencia, habilitando, por ejemplo, un sistema de votación electrónico para el Consejo Regional (CORE) que permite a la ciudadanía saber exactamente cómo votó cada consejero, una herramienta que, según Santana, existía pero no se utilizaba.
Frente a los informes de Contraloría sobre la administración anterior, Santana los atribuyó más a "un problema de gestión y de administración" que a una intencionalidad dolosa, asegurando que se están cerrando los vacíos de control que permitían malas prácticas. Entre las medidas adoptadas se cuenta un nuevo plan de auditoría y la revisión de todas las boletas de garantía, tras detectarse un documento falso en el contrato de aseo del GORE.
Este giro estratégico busca, en última instancia, fortalecer la autonomía regional y optimizar el uso de recursos públicos cada vez más escasos, bajo la premisa de "con menos platas, hacer más". El gobernador Alejandro Santana se ha comprometido a que este modelo de gestión no solo transformará la Región de Los Lagos, sino que también sentará las bases para que la descentralización en Chile sea una realidad tangible y no solo "de papel". El éxito de esta ambiciosa reforma dependerá de la capacidad de los nuevos equipos técnicos y de la colaboración de los distintos actores locales para adaptarse a un sistema que privilegia los resultados, la eficiencia y la responsabilidad sobre los fondos públicos.
Fuente información: Rocío Gambra
Un cambio de paradigma "en 180 grados". Así definió el Gobernador de la Región de Los Lagos, Alejandro Santana, la transformación que está impulsando en el modelo de gestión del Gobierno Regional (GORE). En entrevista con Paislobo Prensa, la autoridad detalló su plan para que el GORE deje de actuar principalmente como una "institución financiera" que traspasa fondos a los ministerios y se convierta en un ente creador y ejecutor de sus propias políticas, basadas en las necesidades y prioridades de la región.
El diagnóstico que motiva esta reforma es contundente. Según cifras presentadas por Santana, al asumir su cargo se encontró con un escenario complejo: por primera vez en ocho años, el presupuesto regional arrastraba una "deuda flotante" y, para 2025, la región cuenta con el presupuesto más bajo de los últimos nueve años. A esto se suma que recibió el GORE con un 78% de sus recursos comprometidos para los próximos cuatro años.
Un análisis más profundo de esos compromisos reveló el nudo del problema: el 72% de dichos proyectos corresponden a iniciativas ministeriales, mientras que solo un 28% son políticas propias del GORE, como los Fondos Regionales de Inversión Local (FRIL) o programas comunitarios. "El rol del gobierno regional ha sido mayoritariamente un rol financiero. Llegan los ministerios y le dicen: 'oiga, señor gobierno regional, financien ustedes'", explicó Santana, atribuyendo esta dinámica a una "inercia" de la época de los intendentes designados por el poder central.
El objetivo de la nueva administración es invertir esa proporción: que al final de su período, el 70% de los recursos financien programas propios del GORE y solo el 30% se destine a iniciativas sectoriales ministeriales. "Si no lo logramos, cerremos la puerta por fuera y volvamos al intendente", sentenció la autoridad, subrayando la necesidad de dotar de contenido real a la descentralización.
Nuevas políticas de Salud y Seguridad Pública
Para materializar este cambio, el GORE está creando unidades técnicas especializadas en áreas como infraestructura, salud y seguridad. En materia de salud, Santana ejemplificó que actualmente el GORE financia 22 programas distintos de los Servicios de Salud, pero sin tener control sobre los resultados ni la gestión. "Cuando le preguntan al gobierno regional, ¿cuál ha sido el resultado? El gobierno regional dice: no lo sé", admitió.
A partir de 2026, el modelo cambiará drásticamente. El GORE diseñará sus propios programas de salud, basados en la prevalencia de enfermedades en la región, y los Servicios de Salud, municipios o incluso clínicas privadas podrán postular para ser los "prestadores" de dichos programas. "El programa es del gobierno regional, quien monitorea el programa es el gobierno regional", enfatizó Santana.
En seguridad pública, el enfoque será similar. El gobernador reveló que, aunque el GORE ha financiado "dos de cada tres pesos" en esta materia entre 2018 y 2024, una evaluación con las policías y la Fiscalía determinó que entre un 30% y un 40% de esos fondos "no sirven para nada", principalmente por la compra de tecnología inadecuada, como cámaras de vigilancia que son hackeables o no tienen la resolución necesaria para ser usadas como medio de prueba.
Para corregirlo, el próximo 7 de julio se lanzará la nueva política de financiamiento en seguridad del GORE. A partir de entonces, cualquier municipio que postule a fondos de seguridad deberá cumplir con requisitos estrictos: tener su plan de seguridad comunal actualizado, presentar informes técnicos de las policías que validen el equipamiento a adquirir y se otorgarán puntajes adicionales a las comunas que fiscalicen eficientemente las patentes de alcoholes y los juegos ilegales.
Incentivos a la eficiencia y mayor transparencia
La nueva doctrina de gestión también incluye un sistema de incentivos para las 30 comunas de la región. Santana anunció que los municipios que demuestren mayor eficiencia en la formulación y ejecución de proyectos, como los FRIL, podrán optar a más recursos de manera automática. "El concepto de la eficiencia también va a tener un factor de incidencia en los recursos que nosotros vamos a asignar", afirmó, buscando así modernizar la gestión municipal.
Paralelamente, se está invirtiendo en tecnología para aumentar la transparencia, habilitando, por ejemplo, un sistema de votación electrónico para el Consejo Regional (CORE) que permite a la ciudadanía saber exactamente cómo votó cada consejero, una herramienta que, según Santana, existía pero no se utilizaba.
Frente a los informes de Contraloría sobre la administración anterior, Santana los atribuyó más a "un problema de gestión y de administración" que a una intencionalidad dolosa, asegurando que se están cerrando los vacíos de control que permitían malas prácticas. Entre las medidas adoptadas se cuenta un nuevo plan de auditoría y la revisión de todas las boletas de garantía, tras detectarse un documento falso en el contrato de aseo del GORE.
Este giro estratégico busca, en última instancia, fortalecer la autonomía regional y optimizar el uso de recursos públicos cada vez más escasos, bajo la premisa de "con menos platas, hacer más". El gobernador Alejandro Santana se ha comprometido a que este modelo de gestión no solo transformará la Región de Los Lagos, sino que también sentará las bases para que la descentralización en Chile sea una realidad tangible y no solo "de papel". El éxito de esta ambiciosa reforma dependerá de la capacidad de los nuevos equipos técnicos y de la colaboración de los distintos actores locales para adaptarse a un sistema que privilegia los resultados, la eficiencia y la responsabilidad sobre los fondos públicos.
Fuente información: Rocío Gambra
