El gran pendiente de Osorno, una auditoría completa al municipio
Por Pablo Benavides.
Si bien es sabido que el reciente alcalde electo de Osorno Emeterio Carrillo, pertenece a las filas del mismo partido político que del saliente Jaime Bertín. No cabe lugar a dudas que la transparencia a sus electores y también los que no lo eligieron es fundamental en este nuevo Chile pos estallido social.
Con un total de 12 años de administración municipal y quizás pudiera ser más, si no fuese por la ley que prohíbe la reelección indefinida. Jaime Bertín ha sufrido serios cuestionamientos en cuanto a la gestión de los recursos municipales, oficios administrativos, informes de contraloría y también su ya abultado patrimonio. Con estos cuestionamientos, que no son pocos y que han llamado la atención de la ciudadanía Osornina, es que fue electo su correligionario como nuevo alcalde de la ciudad. Lo que pone en el centro de la atención de cuál será el rol fiscalizador de la nueva gestión edilicia.
Emeterio Carrillo que ya lleva varios años de concejal, siempre a la sombra del otrora alcalde, ha de enfrentar la posibilidad que brinda realizar una auditoría completa a la gestión de Jaime Bertín, no solamente contable (área de expertis de Bertín), también es importante una auditoría administrativa, el apurar los procesos pendientes con contraloría y poder dar luces a la red clientelar que por hoy gobierna al municipio. Es decir mostrar de manera pública que estuvo bien, que estuvo mal y que se puede corregir a los ojos de toda la ciudadanía.
También es importante que esta actividad fiscalizadora, sea realizada por un ente externo, un tercero, el que seguramente será licitado, pero más allá del proceso en sí, es que este ente no tenga redes municipales locales asociadas, esto con el fin de evitar los ya conocidos conflictos de intereses. El municipio conoce de estos hechos, donde el mayor exponente, es el electo concejal más votado, hablamos del RN Jorge Castilla, apodado como “multirut” por la diputada Nuyado, el cual recibe 3 sueldos públicos: como concejal, funcionario del hospital y subdirector médico del servicio de salud, ¿Cómo lo hace para poder trabajar en 3 lugares al mismo tiempo?, nadie lo sabe…
Pero más allá de las situaciones poco decorosas que puedan suceder en la pueblerina actividad política de la comuna, es necesario que se pueda brindar una gestión transparente, de cara a la ciudadanía y participativa. Grandes temas que no sabemos hasta que asuma “Don Emeterio”, si este dará el ancho o no.
Si bien es sabido que el reciente alcalde electo de Osorno Emeterio Carrillo, pertenece a las filas del mismo partido político que del saliente Jaime Bertín. No cabe lugar a dudas que la transparencia a sus electores y también los que no lo eligieron es fundamental en este nuevo Chile pos estallido social.
Con un total de 12 años de administración municipal y quizás pudiera ser más, si no fuese por la ley que prohíbe la reelección indefinida. Jaime Bertín ha sufrido serios cuestionamientos en cuanto a la gestión de los recursos municipales, oficios administrativos, informes de contraloría y también su ya abultado patrimonio. Con estos cuestionamientos, que no son pocos y que han llamado la atención de la ciudadanía Osornina, es que fue electo su correligionario como nuevo alcalde de la ciudad. Lo que pone en el centro de la atención de cuál será el rol fiscalizador de la nueva gestión edilicia.
Emeterio Carrillo que ya lleva varios años de concejal, siempre a la sombra del otrora alcalde, ha de enfrentar la posibilidad que brinda realizar una auditoría completa a la gestión de Jaime Bertín, no solamente contable (área de expertis de Bertín), también es importante una auditoría administrativa, el apurar los procesos pendientes con contraloría y poder dar luces a la red clientelar que por hoy gobierna al municipio. Es decir mostrar de manera pública que estuvo bien, que estuvo mal y que se puede corregir a los ojos de toda la ciudadanía.
También es importante que esta actividad fiscalizadora, sea realizada por un ente externo, un tercero, el que seguramente será licitado, pero más allá del proceso en sí, es que este ente no tenga redes municipales locales asociadas, esto con el fin de evitar los ya conocidos conflictos de intereses. El municipio conoce de estos hechos, donde el mayor exponente, es el electo concejal más votado, hablamos del RN Jorge Castilla, apodado como “multirut” por la diputada Nuyado, el cual recibe 3 sueldos públicos: como concejal, funcionario del hospital y subdirector médico del servicio de salud, ¿Cómo lo hace para poder trabajar en 3 lugares al mismo tiempo?, nadie lo sabe…
Pero más allá de las situaciones poco decorosas que puedan suceder en la pueblerina actividad política de la comuna, es necesario que se pueda brindar una gestión transparente, de cara a la ciudadanía y participativa. Grandes temas que no sabemos hasta que asuma “Don Emeterio”, si este dará el ancho o no.
