¿Dónde están las disculpas?
Por Héctor Zúñiga Gajardo.
Quisiera referirme al reciente fallo judicial en el caso del puente Pío Nono, donde el carabinero acusado ha sido absuelto de todos los cargos. Este desenlace nos obliga a recordar cómo, en su momento, autoridades que hoy ocupan cargos en el gobierno, incluso la presidencia, rasgaron vestiduras y no dudaron en apuntar con el dedo, acusando al carabinero de un crimen.
En aquel entonces, estas autoridades, muchos de los cuales eran diputados, aprovecharon políticamente el caso, utilizando sus plataformas y recursos para barrer públicamente contra el carabinero y la institución de Carabineros de Chile. Alimentaron un clima de desconfianza y desprecio hacia quienes arriesgan sus vidas diariamente para protegernos, todo por un oportunismo político.
Ahora que la justicia ha hablado y ha demostrado la inocencia del carabinero, surge una pregunta inevitable: ¿Tendrán estas mismas autoridades, ahora en el gobierno, la valentía para pedir disculpas públicas? ¿Serán capaces de reconocer el daño irreparable que causaron a la reputación y el honor de un servidor público y a toda una institución?
La coherencia y la responsabilidad son valores esenciales en la política. Esperamos que aquellos que hicieron declaraciones precipitadas y dañinas, que utilizaron este caso para sus propios beneficios políticos, ahora demuestren que la justicia y la verdad son más importantes que cualquier estrategia de poder.
Es momento de que estas autoridades den un paso adelante y se disculpen públicamente, mostrando que tienen la integridad necesaria para rectificar sus errores. La sociedad chilena merece líderes que actúen con justicia y transparencia, no con oportunismo.
Fuente información: heangajardo@gmail.com
Quisiera referirme al reciente fallo judicial en el caso del puente Pío Nono, donde el carabinero acusado ha sido absuelto de todos los cargos. Este desenlace nos obliga a recordar cómo, en su momento, autoridades que hoy ocupan cargos en el gobierno, incluso la presidencia, rasgaron vestiduras y no dudaron en apuntar con el dedo, acusando al carabinero de un crimen.
En aquel entonces, estas autoridades, muchos de los cuales eran diputados, aprovecharon políticamente el caso, utilizando sus plataformas y recursos para barrer públicamente contra el carabinero y la institución de Carabineros de Chile. Alimentaron un clima de desconfianza y desprecio hacia quienes arriesgan sus vidas diariamente para protegernos, todo por un oportunismo político.
Ahora que la justicia ha hablado y ha demostrado la inocencia del carabinero, surge una pregunta inevitable: ¿Tendrán estas mismas autoridades, ahora en el gobierno, la valentía para pedir disculpas públicas? ¿Serán capaces de reconocer el daño irreparable que causaron a la reputación y el honor de un servidor público y a toda una institución?
La coherencia y la responsabilidad son valores esenciales en la política. Esperamos que aquellos que hicieron declaraciones precipitadas y dañinas, que utilizaron este caso para sus propios beneficios políticos, ahora demuestren que la justicia y la verdad son más importantes que cualquier estrategia de poder.
Es momento de que estas autoridades den un paso adelante y se disculpen públicamente, mostrando que tienen la integridad necesaria para rectificar sus errores. La sociedad chilena merece líderes que actúen con justicia y transparencia, no con oportunismo.
Fuente información: heangajardo@gmail.com