Colapso de alcantarilla afecta a escuela rural de Osorno
Un foco de insalubridad afecta a la comunidad educativa de la Escuela Rural de Pichil, en la comuna de Osorno, debido al colapso de una cámara de alcantarillado ubicada en las cercanías del establecimiento. Aguas servidas están ingresando al perímetro escolar, específicamente al patio utilizado como estacionamiento por los docentes, generando intensos malos olores que han provocado malestares físicos en alumnos y alterando el normal funcionamiento de las actividades académicas.
Una compleja situación sanitaria se vive por estos días en la Escuela Rural de Pichil, ubicada en la comuna de Osorno, Región de Los Lagos. El colapso de una cámara de la red pública de alcantarillado, situada en las inmediaciones del recinto educativo, ha provocado el vertimiento de aguas servidas que escurren e ingresan directamente al patio del establecimiento, generando un ambiente insalubre y riesgoso para estudiantes, docentes y personal asistente.
La denuncia fue expuesta por el Concejal Juan Carlos Velásquez a Paislobo Prensa, quien detalló la gravedad del problema y sus consecuencias directas en la rutina escolar. Según su testimonio, la cámara de alcantarillado afectada pertenecería a la red de una población cercana y su falla se debería, presuntamente, a una falta de mantenimiento adecuado.
El Concejal manifestó su preocupación: "Mira, el tema que ocurre acá, que esta es una cámara, una red de la población, la cual aparentemente no tiene el mantenimiento y habría que determinar desde dónde viene. Al parecer, me parece mucho que viene de la planta de tratamiento que está más arriba, cerca ahí, y que eso nunca se ha solucionado", señaló, apuntando a un problema que podría tener un origen más complejo y requeriría una intervención mayor.
Si bien el mantenimiento de la red de alcantarillado externa escapa a las competencias directas del Departamento de Administración de Educación Municipal (DAEM) de Osorno, la situación impacta de lleno en el entorno escolar. "El DAEM aquí, en el sentido de poder solucionar el tema, no es competencia de ello, con la excepción de que sí está ingresando todos los líquidos que se van saliendo de esa cámara al interior del establecimiento educacional del patio, donde los profesores es el estacionamiento para sus vehículos, lo cual no lo pueden ocupar hoy, según versión de ellos", explicó el Concejal.
La consecuencia inmediata es doble: por un lado, se genera un foco infeccioso por la presencia de aguas servidas en un área de tránsito y permanencia dentro de la escuela; por otro, se reduce el espacio disponible, obligando a los docentes a estacionar en otras zonas del patio que habitualmente son usadas por los niños para recreación. "La situación que genera es que donde guardan hoy día es parte del patio del establecimiento educacional al que deberían ocupar los niños", agregó el Velásquez.
Más allá de los problemas logísticos y de infraestructura, el principal foco de preocupación radica en el impacto sanitario y en la convivencia. Los intensos y desagradables olores que emanan del efluente percolado han comenzado a generar efectos físicos en los miembros de la comunidad educativa. "Habría que ver la posibilidad y hacer un llamado de un diagnóstico respecto a lo que está sucediendo claramente con esa cámara y los efectos colaterales de los malos olores, los cuales perjudican, digamos, a algunos alumnos con mareos, náuseas", alertó el Concejal.
La presencia constante de estos olores no solo representa un riesgo para la salud por la posible inhalación de gases nocivos, sino que también deteriora el ambiente de aprendizaje. "Específicamente hay niños chicos y genera una muy mala convivencia al interior por los olores que se sienten y se olfatean, así, literal, al interior del establecimiento educacional (...) el olor en el medio ambiente es bastante nocivo para la salud", enfatizó, subrayando la urgencia de abordar el problema de raíz.
La situación en la Escuela Rural de Pichil se mantiene en desarrollo. Se espera que en las próximas horas o días se realicen las inspecciones técnicas y sanitarias anunciadas por las autoridades. La comunidad educativa permanece en alerta, esperando una solución definitiva que erradique el foco de insalubridad.
Fuente información: Álvaro Torres Riobó
Una compleja situación sanitaria se vive por estos días en la Escuela Rural de Pichil, ubicada en la comuna de Osorno, Región de Los Lagos. El colapso de una cámara de la red pública de alcantarillado, situada en las inmediaciones del recinto educativo, ha provocado el vertimiento de aguas servidas que escurren e ingresan directamente al patio del establecimiento, generando un ambiente insalubre y riesgoso para estudiantes, docentes y personal asistente.
La denuncia fue expuesta por el Concejal Juan Carlos Velásquez a Paislobo Prensa, quien detalló la gravedad del problema y sus consecuencias directas en la rutina escolar. Según su testimonio, la cámara de alcantarillado afectada pertenecería a la red de una población cercana y su falla se debería, presuntamente, a una falta de mantenimiento adecuado.
El Concejal manifestó su preocupación: "Mira, el tema que ocurre acá, que esta es una cámara, una red de la población, la cual aparentemente no tiene el mantenimiento y habría que determinar desde dónde viene. Al parecer, me parece mucho que viene de la planta de tratamiento que está más arriba, cerca ahí, y que eso nunca se ha solucionado", señaló, apuntando a un problema que podría tener un origen más complejo y requeriría una intervención mayor.
Si bien el mantenimiento de la red de alcantarillado externa escapa a las competencias directas del Departamento de Administración de Educación Municipal (DAEM) de Osorno, la situación impacta de lleno en el entorno escolar. "El DAEM aquí, en el sentido de poder solucionar el tema, no es competencia de ello, con la excepción de que sí está ingresando todos los líquidos que se van saliendo de esa cámara al interior del establecimiento educacional del patio, donde los profesores es el estacionamiento para sus vehículos, lo cual no lo pueden ocupar hoy, según versión de ellos", explicó el Concejal.
La consecuencia inmediata es doble: por un lado, se genera un foco infeccioso por la presencia de aguas servidas en un área de tránsito y permanencia dentro de la escuela; por otro, se reduce el espacio disponible, obligando a los docentes a estacionar en otras zonas del patio que habitualmente son usadas por los niños para recreación. "La situación que genera es que donde guardan hoy día es parte del patio del establecimiento educacional al que deberían ocupar los niños", agregó el Velásquez.
Más allá de los problemas logísticos y de infraestructura, el principal foco de preocupación radica en el impacto sanitario y en la convivencia. Los intensos y desagradables olores que emanan del efluente percolado han comenzado a generar efectos físicos en los miembros de la comunidad educativa. "Habría que ver la posibilidad y hacer un llamado de un diagnóstico respecto a lo que está sucediendo claramente con esa cámara y los efectos colaterales de los malos olores, los cuales perjudican, digamos, a algunos alumnos con mareos, náuseas", alertó el Concejal.
La presencia constante de estos olores no solo representa un riesgo para la salud por la posible inhalación de gases nocivos, sino que también deteriora el ambiente de aprendizaje. "Específicamente hay niños chicos y genera una muy mala convivencia al interior por los olores que se sienten y se olfatean, así, literal, al interior del establecimiento educacional (...) el olor en el medio ambiente es bastante nocivo para la salud", enfatizó, subrayando la urgencia de abordar el problema de raíz.
La situación en la Escuela Rural de Pichil se mantiene en desarrollo. Se espera que en las próximas horas o días se realicen las inspecciones técnicas y sanitarias anunciadas por las autoridades. La comunidad educativa permanece en alerta, esperando una solución definitiva que erradique el foco de insalubridad.
Para entender mejor
- Aguas Servidas: También conocidas como aguas residuales o negras. Corresponden al agua utilizada que lleva desechos de origen doméstico, industrial o comercial, transportada a través del sistema de alcantarillado. Su manejo inadecuado representa un grave riesgo sanitario.
- Cámara de Alcantarillado: Estructura subterránea (generalmente de hormigón o plástico) que permite el acceso a las tuberías de la red de alcantarillado para inspección, limpieza, mantenimiento y reparación.
- Sumario Sanitario: Procedimiento administrativo que realiza la Autoridad Sanitaria (Seremi de Salud) para investigar infracciones a la normativa sanitaria y ambiental. Puede concluir con sanciones como multas, clausuras temporales o definitivas, o exigencia de medidas correctivas.
- Planta de Tratamiento: Instalación destinada a depurar las aguas servidas antes de devolverlas al medio ambiente (ríos, lagos, mar) o reutilizarlas, eliminando contaminantes físicos, químicos y biológicos.
Fuente información: Álvaro Torres Riobó