Crimen en Osorno: La historia de venganza, robo y crueldad que dejó a un joven de 19 años muerto

Crimen en Osorno: La historia de venganza, robo y crueldad que dejó a un joven de 19 años muerto
El Juzgado de Garantía de Osorno decretó la prisión preventiva para cuatro jóvenes, de entre 18 y 20 años, imputados por el delito de robo con homicidio. Los acusados habrían convocado a la víctima, un joven de 19 años, al Parque Cuarto Centenario con el pretexto de compartir, para luego agredirlo brutalmente, sustraerle sus pertenencias y, en un acto de extrema crueldad, regresar para grabar su agonía y difundirla en redes sociales, hecho que finalmente facilitó su identificación y detención por parte de la PDI.

El magistrado Miguel García H., del Juzgado de Garantía de Osorno, decretó este martes la medida cautelar de prisión preventiva para los cuatro imputados por el brutal crimen ocurrido en el Parque Cuarto Centenario. Los jóvenes M. Bustamante, B. Martínez, G. Navarro y S. Zúñiga, cuyas edades fluctúan entre los 18 y 20 años, fueron formalizados por el Ministerio Público por el delito de robo con homicidio, arriesgando una pena que va desde los 15 años y un día hasta el presidio perpetuo calificado.

Según expuso la fiscal jefe de Osorno, María Angélica de Miguel, los hechos se remontan a la tarde del pasado jueves, cerca de las 18:00 horas, cuando la víctima, identificada como Marcelo Vargas Carrasco, de 19 años y apodado "El Piña", fue contactado por M. Bustamante, un conocido suyo, para reunirse en el céntrico parque con el pretexto de "fumar y tomar algo".

Sin embargo, el encuentro era una emboscada planificada. La génesis del ataque, según la versión de los imputados, sería una "venganza" liderada por B. Martínez, quien acusaba a Vargas de haber intentado robarle una motocicleta y haberlo herido semanas atrás, un hecho que, según la fiscal, nunca fue denunciado formalmente.

Al llegar la víctima, fue confrontado por Martínez con la frase "¿te acuerdas de mí?". Lo que comenzó como una pelea uno a uno, escaló rápidamente. Una vez que Vargas cayó al suelo, los otros tres imputados se sumaron a la golpiza, concentrando los golpes de puños y pies principalmente en la cabeza. Durante la agresión, le sustrajeron diversas especies: un reloj, un polerón, un gorro de lana, un banano, una chaqueta blanca marca North Face, zapatillas marca Jordan y dinero en efectivo.

La brutalidad no terminó ahí. Testigos relataron que, tras un primer retiro, dos de los imputados, Bustamante y Martínez, regresaron para "rematar" a la víctima, propinándole más golpes mientras agonizaba. En ese momento, procedieron a grabarlo con sus teléfonos móviles. La fiscal de Miguel fue enfática al señalar el propósito de estos registros: “El fin tenemos entendido que era jactarse de lo que habían hecho, porque los videos, ese es el sentido que se le dan a estos videos, jactarse de lo que estaban haciendo. Y, por lo tanto, compartirlo en redes sociales”.

Fueron transeúntes quienes, horrorizados por la escena, alertaron a los guardias del parque. Estos, a su vez, contactaron a Carabineros y al SAMU. El equipo médico encontró a la víctima con un paro cardíaco; fue reanimado en el lugar, pero sufrió un segundo paro durante el traslado al Hospital Base de Osorno, donde ingresó a las 19:10 horas con un traumatismo craneoencefálico cerrado y conectado a asistencia mecánica.

Debido a que los agresores robaron su documentación, el joven ingresó como N.N. (no identificado) y solo pudo ser reconocido formalmente el día sábado, después de que sus padres interpusieran una denuncia por presunta desgracia. Finalmente, falleció aproximadamente 48 horas después de su ingreso.

La viralización de los videos en redes sociales generó una "funa" masiva contra los agresores. Paradójicamente, fue esta presión social la que precipitó su caída. M. Bustamante se presentó el domingo en la PDI, no para confesar, sino para denunciar ser víctima de una "funa injustificada". El resto de los imputados fueron detenidos por la PDI bajo orden judicial. Entre los antecedentes de los acusados, se cuenta que uno de ellos es estudiante de cuarto medio del Colegio San Mateo, otro es estudiante universitario de Psicología, uno tiene una causa vigente por microtráfico y otro había sido formalizado por porte de arma blanca.

La Fiscalía cuenta con pruebas contundentes, como las declaraciones de testigos, las vestimentas de los imputados con sangre de la víctima y los propios videos recuperados de sus dispositivos. La fiscalía, además, confirmó que existe un quinto imputado ya individualizado y que se trabaja en su pronta captura.

Durante la audiencia, la fiscalía argumentó la existencia de las agravantes de premeditación y alevosía. El propio juez a cargo manifestó su consternación por la crueldad del acto, destacando lo inédito de que los agresores, lejos de arrepentirse o prestar auxilio, volvieran a la escena para grabar a la víctima.

"Aquí hay un desprecio total a la vida de otro joven igual que ellos, de 19 años de edad. Que lo dejaron tirado, lo dejaron N.N.. Y lo que les interesa a ellos es que habían sido funados en redes sociales", sentenció la fiscal de Miguel. El tribunal fijó un plazo de investigación de 100 días, mientras los cuatro imputados permanecerán en prisión preventiva en distintos recintos penitenciarios, tras una solicitud de las defensas por las amenazas de muerte que han recibido.


Fuente información: Álvaro Torres Riobó
Siguiente Anterior
*****