Estudio revela que si eres pobre tienes mayores posibilidades de sufrir demencia temprana
Nuevos hallazgos sobre el impacto del nivel socioeconómico y estilo de vida en la demencia temprana y tardía.
Un estudio pionero ha revelado diferencias significativas en los perfiles de riesgo de la demencia de aparición temprana comparada con la de inicio tardío, subrayando la influencia crítica del estatus socioeconómico y el estilo de vida en el desarrollo de esta condición. El análisis, realizado con datos del Biobanco del Reino Unido e involucrando a más de 550,000 participantes, ofrece una perspectiva detallada sobre cómo estos factores afectan diferencialmente el riesgo de demencia.
La investigación se basó en un estudio de cohorte prospectivo que distinguió entre casos de demencia temprana (antes de los 65 años) y tardía (65 años o más) a lo largo de un seguimiento medio de casi 12 años. Se excluyeron participantes sin información completa sobre factores socioeconómicos, y se emplearon modelos de regresión de riesgos proporcionales de Cox para analizar el impacto de estos factores y del estilo de vida en la incidencia de la demencia.
Este estudio resalta la complejidad de las relaciones entre el nivel socioeconómico, los estilos de vida y la demencia, particularmente en su aparición temprana. Aunque promover hábitos saludables es vital, abordar las desigualdades socioeconómicas podría tener un impacto más significativo en la prevención de la demencia. La investigación también indica que la diabetes tipo 2 puede intensificar el riesgo de demencia temprana en personas de bajo nivel socioeconómico, sugiriendo la necesidad de estrategias de prevención específicas para este y otros subgrupos vulnerables.
Los hallazgos sugieren que las intervenciones para prevenir la demencia no deben limitarse a la promoción de estilos de vida saludables, sino que también deben incluir esfuerzos para mejorar los determinantes sociales de la salud. Esta investigación subraya la urgencia de políticas públicas y estrategias de salud que aborden las raíces socioeconómicas de la demencia, especialmente en su fase temprana.
Fuente: https://www.thelancet.com/journals/lanhl/article/PIIS2666-7568(23)00211-8/fulltext#%20
Un estudio pionero ha revelado diferencias significativas en los perfiles de riesgo de la demencia de aparición temprana comparada con la de inicio tardío, subrayando la influencia crítica del estatus socioeconómico y el estilo de vida en el desarrollo de esta condición. El análisis, realizado con datos del Biobanco del Reino Unido e involucrando a más de 550,000 participantes, ofrece una perspectiva detallada sobre cómo estos factores afectan diferencialmente el riesgo de demencia.
La investigación se basó en un estudio de cohorte prospectivo que distinguió entre casos de demencia temprana (antes de los 65 años) y tardía (65 años o más) a lo largo de un seguimiento medio de casi 12 años. Se excluyeron participantes sin información completa sobre factores socioeconómicos, y se emplearon modelos de regresión de riesgos proporcionales de Cox para analizar el impacto de estos factores y del estilo de vida en la incidencia de la demencia.
- Se documentaron 502 casos de demencia de inicio temprano y 5,768 casos de demencia de inicio tardío.
- El riesgo ajustado de demencia temprana fue 3.38 veces mayor en individuos de bajo nivel socioeconómico comparado con aquellos de nivel alto.
- La adopción de un estilo de vida saludable solo medió un 3.2% en la asociación entre el nivel socioeconómico y el riesgo de demencia temprana, destacando que factores socioeconómicos juegan un papel más determinante.
- Las personas de bajo nivel socioeconómico con estilos de vida poco saludables presentaron un riesgo 5.40 veces mayor de desarrollar demencia temprana en comparación con sus contrapartes de nivel socioeconómico alto y estilos de vida saludables.
Este estudio resalta la complejidad de las relaciones entre el nivel socioeconómico, los estilos de vida y la demencia, particularmente en su aparición temprana. Aunque promover hábitos saludables es vital, abordar las desigualdades socioeconómicas podría tener un impacto más significativo en la prevención de la demencia. La investigación también indica que la diabetes tipo 2 puede intensificar el riesgo de demencia temprana en personas de bajo nivel socioeconómico, sugiriendo la necesidad de estrategias de prevención específicas para este y otros subgrupos vulnerables.
Los hallazgos sugieren que las intervenciones para prevenir la demencia no deben limitarse a la promoción de estilos de vida saludables, sino que también deben incluir esfuerzos para mejorar los determinantes sociales de la salud. Esta investigación subraya la urgencia de políticas públicas y estrategias de salud que aborden las raíces socioeconómicas de la demencia, especialmente en su fase temprana.
Fuente: https://www.thelancet.com/journals/lanhl/article/PIIS2666-7568(23)00211-8/fulltext#%20