Pakistán reporta 26 civiles muertos y 46 heridos tras ataques con misiles indios en Punjab y Cachemira
Al menos 26 civiles perdieron la vida y otros 46 resultaron heridos en Pakistán, luego de una serie de ataques con misiles que, según Islamabad, fueron lanzados por la India este martes contra la provincia de Punjab y la región de Cachemira bajo administración paquistaní. Mientras Nueva Delhi asegura que los objetivos eran infraestructuras de grupos terroristas, el gobierno paquistaní ha calificado la ofensiva como un "acto de guerra" y una flagrante violación a su soberanía, denunciando que los bombardeos impactaron principalmente áreas residenciales y lugares de culto.
Islamabad / Nueva Delhi.- La frágil paz entre India y Pakistán, dos potencias nucleares con una larga historia de disputas territoriales, se ha visto nuevamente pulverizada. En horas recientes, el gobierno de Pakistán informó a la comunidad internacional que una serie de ataques con misiles, presuntamente ejecutados por las fuerzas armadas de la India, impactaron diversas localidades en la provincia paquistaní de Punjab y en la zona de Cachemira administrada por Islamabad. El saldo preliminar de esta ofensiva, según fuentes oficiales paquistaníes, es de al menos 26 civiles fallecidos y 46 heridos, generando una condena inmediata y enérgica por parte de las autoridades locales.
Desde Islamabad, el Ministerio de Asuntos Exteriores paquistaní emitió un duro comunicado calificando los ataques como un "acto de guerra" y una "violación inaceptable de su soberanía territorial". Las autoridades paquistaníes sostienen que los misiles impactaron indiscriminadamente zonas densamente pobladas, afectando viviendas civiles, mercados e incluso mezquitas, lo que contradice la versión entregada por Nueva Delhi. Imágenes difundidas por medios locales paquistaníes mostraban edificios destruidos y equipos de rescate trabajando entre los escombros, aunque la veracidad de dicho material no ha podido ser confirmada de manera independiente por este medio en su totalidad.
Por su parte, el gobierno de la India, a través de su Ministerio de Defensa, reconoció la ejecución de "ataques de precisión" en territorio paquistaní. No obstante, Nueva Delhi argumenta que estas operaciones estuvieron dirigidas exclusivamente contra "infraestructuras y campamentos de entrenamiento de grupos terroristas" que, según su inteligencia, planeaban nuevos atentados en suelo indio. Esta acción militar, indicó un portavoz indio, se llevó a cabo en represalia directa por el reciente atentado terrorista ocurrido en la región de Cachemira bajo administración india, donde 26 turistas perdieron la vida en un ataque con bomba. India ha responsabilizado consistentemente a militantes separatistas que, asegura, operan desde y con el apoyo de Pakistán, una imputación que Islamabad ha negado categóricamente en reiteradas ocasiones, ofreciendo incluso cooperación para investigar el incidente.
La tensión bilateral, ya crónicamente elevada debido a la disputa por la soberanía de la región de Cachemira, ha alcanzado con estos hechos su punto más álgido en décadas. La comunidad internacional ha comenzado a expresar su profunda preocupación por el cariz que toman los acontecimientos. Organismos como las Naciones Unidas han instado a ambas naciones a la máxima moderación y a buscar canales de diálogo para evitar una escalada mayor que podría tener consecuencias catastróficas, considerando que tanto India como Pakistán poseen arsenales nucleares.
Analistas internacionales señalan que este ciclo de represalias y contra-represalias sumerge a la región en una espiral peligrosa. La acusación de Pakistán de un "acto de guerra" podría, según expertos en derecho internacional, sentar las bases para una respuesta militar de mayor envergadura, aunque se espera que la presión diplomática internacional juegue un rol crucial en las próximas horas para intentar contener la situación.
Desde Chile, el Ministerio de Relaciones Exteriores, a través de un comunicado oficial emitido esta tarde, expresó su "profunda preocupación por la escalada de violencia entre India y Pakistán". La Cancillería chilena hizo un "urgente llamado a ambas naciones hermanas a deponer las acciones hostiles, a respetar el derecho internacional y a retomar la vía del diálogo como único mecanismo para la resolución pacífica de sus diferencias". Asimismo, el gobierno chileno extendió sus condolencias a las familias de todas las víctimas, tanto en Pakistán como en India.
La situación actual es extremadamente volátil. Se espera que en las próximas horas y días se intensifiquen los esfuerzos diplomáticos por parte de potencias mundiales y organismos internacionales para mediar entre India y Pakistán y evitar un conflicto a gran escala. No obstante, la retórica beligerante de ambas partes y la gravedad de las acusaciones mutuas mantienen abierta la posibilidad de nuevas acciones militares. El Consejo de Seguridad de la ONU podría ser convocado a una reunión de emergencia para tratar la crisis. La principal interrogante es si los canales diplomáticos lograrán imponerse sobre la lógica de la confrontación militar en una de las regiones más militarizadas y con mayor riesgo nuclear del planeta. Las próximas 72 horas serán cruciales para determinar el rumbo de este conflicto.
Fuente información: Agencia MI
Islamabad / Nueva Delhi.- La frágil paz entre India y Pakistán, dos potencias nucleares con una larga historia de disputas territoriales, se ha visto nuevamente pulverizada. En horas recientes, el gobierno de Pakistán informó a la comunidad internacional que una serie de ataques con misiles, presuntamente ejecutados por las fuerzas armadas de la India, impactaron diversas localidades en la provincia paquistaní de Punjab y en la zona de Cachemira administrada por Islamabad. El saldo preliminar de esta ofensiva, según fuentes oficiales paquistaníes, es de al menos 26 civiles fallecidos y 46 heridos, generando una condena inmediata y enérgica por parte de las autoridades locales.
Desde Islamabad, el Ministerio de Asuntos Exteriores paquistaní emitió un duro comunicado calificando los ataques como un "acto de guerra" y una "violación inaceptable de su soberanía territorial". Las autoridades paquistaníes sostienen que los misiles impactaron indiscriminadamente zonas densamente pobladas, afectando viviendas civiles, mercados e incluso mezquitas, lo que contradice la versión entregada por Nueva Delhi. Imágenes difundidas por medios locales paquistaníes mostraban edificios destruidos y equipos de rescate trabajando entre los escombros, aunque la veracidad de dicho material no ha podido ser confirmada de manera independiente por este medio en su totalidad.
Por su parte, el gobierno de la India, a través de su Ministerio de Defensa, reconoció la ejecución de "ataques de precisión" en territorio paquistaní. No obstante, Nueva Delhi argumenta que estas operaciones estuvieron dirigidas exclusivamente contra "infraestructuras y campamentos de entrenamiento de grupos terroristas" que, según su inteligencia, planeaban nuevos atentados en suelo indio. Esta acción militar, indicó un portavoz indio, se llevó a cabo en represalia directa por el reciente atentado terrorista ocurrido en la región de Cachemira bajo administración india, donde 26 turistas perdieron la vida en un ataque con bomba. India ha responsabilizado consistentemente a militantes separatistas que, asegura, operan desde y con el apoyo de Pakistán, una imputación que Islamabad ha negado categóricamente en reiteradas ocasiones, ofreciendo incluso cooperación para investigar el incidente.
La tensión bilateral, ya crónicamente elevada debido a la disputa por la soberanía de la región de Cachemira, ha alcanzado con estos hechos su punto más álgido en décadas. La comunidad internacional ha comenzado a expresar su profunda preocupación por el cariz que toman los acontecimientos. Organismos como las Naciones Unidas han instado a ambas naciones a la máxima moderación y a buscar canales de diálogo para evitar una escalada mayor que podría tener consecuencias catastróficas, considerando que tanto India como Pakistán poseen arsenales nucleares.
Analistas internacionales señalan que este ciclo de represalias y contra-represalias sumerge a la región en una espiral peligrosa. La acusación de Pakistán de un "acto de guerra" podría, según expertos en derecho internacional, sentar las bases para una respuesta militar de mayor envergadura, aunque se espera que la presión diplomática internacional juegue un rol crucial en las próximas horas para intentar contener la situación.
Desde Chile, el Ministerio de Relaciones Exteriores, a través de un comunicado oficial emitido esta tarde, expresó su "profunda preocupación por la escalada de violencia entre India y Pakistán". La Cancillería chilena hizo un "urgente llamado a ambas naciones hermanas a deponer las acciones hostiles, a respetar el derecho internacional y a retomar la vía del diálogo como único mecanismo para la resolución pacífica de sus diferencias". Asimismo, el gobierno chileno extendió sus condolencias a las familias de todas las víctimas, tanto en Pakistán como en India.
La situación actual es extremadamente volátil. Se espera que en las próximas horas y días se intensifiquen los esfuerzos diplomáticos por parte de potencias mundiales y organismos internacionales para mediar entre India y Pakistán y evitar un conflicto a gran escala. No obstante, la retórica beligerante de ambas partes y la gravedad de las acusaciones mutuas mantienen abierta la posibilidad de nuevas acciones militares. El Consejo de Seguridad de la ONU podría ser convocado a una reunión de emergencia para tratar la crisis. La principal interrogante es si los canales diplomáticos lograrán imponerse sobre la lógica de la confrontación militar en una de las regiones más militarizadas y con mayor riesgo nuclear del planeta. Las próximas 72 horas serán cruciales para determinar el rumbo de este conflicto.
Para entender mejor
- Cachemira: Región del Himalaya dividida entre India, Pakistán y, en menor medida, China. Ha sido el principal punto de conflicto entre India y Pakistán desde su independencia en 1947, habiendo provocado varias guerras y enfrentamientos armados. Ambas naciones reclaman la totalidad del territorio.
- Punjab (Paquistaní): Es la provincia más poblada de Pakistán y comparte una extensa frontera con la India. Es una región crucial tanto económica como estratégicamente para Pakistán.
- "Acto de guerra": En el contexto de las relaciones internacionales, esta calificación implica una acusación formal de que un Estado ha utilizado la fuerza armada contra otro de manera ilegal y no provocada, contraviniendo los principios de la Carta de las Naciones Unidas. Puede ser el preludio a una declaración formal de guerra o a la adopción de medidas de represalia significativas.
- Potencias Nucleares: Se refiere a los Estados que han desarrollado y poseen armas nucleares. India y Pakistán realizaron pruebas nucleares en 1998, lo que añade una dimensión de extremo peligro a cualquier conflicto militar directo entre ambos, por el riesgo de una escalada nuclear.
- Islamabad: Capital de Pakistán. En el contexto periodístico, se utiliza frecuentemente como metonimia para referirse al gobierno o a las autoridades paquistaníes.
- Nueva Delhi: Capital de la India. Similar a Islamabad, se utiliza para referirse al gobierno o a las autoridades indias.
Fuente información: Agencia MI