'Agilizódromo': Plataforma digital para identificar y proponer la eliminación de trámites burocráticos
La Fundación Pivotes, a través de su iniciativa 'Agilizódromo', ha creado una plataforma web con formato de 'wiki' para recopilar propuestas de la ciudadanía que permitan optimizar y simplificar el marco legal y administrativo de Chile. El proyecto ya ha identificado 55 ejemplos de regulaciones obsoletas o excesivamente costosas, con el objetivo de presentar soluciones concretas a las autoridades y futuros gobernantes.
La Fundación Pivotes ha puesto en marcha el 'Agilizódromo', una iniciativa digital diseñada para abordar el envejecimiento y la obsolescencia de la normativa chilena. Según Joaquín Barañao, miembro de la fundación, el objetivo es crear una plataforma "muy rica, muy completa de oportunidades de rediseños más inteligentes de la regulación". La propuesta busca identificar y modificar aquellas normas que, si bien pudieron tener sentido en su momento, hoy resultan excesivamente costosas o han sido superadas por la tecnología.
Barañao explicó que el marco legal y reglamentario "va envejeciendo" y que, en muchos casos, el riesgo ponderado en el pasado fue "demasiado conservador", sacrificando "mucho para prevenir cierta probabilidad". Como ejemplo, citó el permiso notarial para mudanzas, una medida que data de hace 50 años, cuando el objetivo era demostrar que los muebles no eran robados. La fundación propone reemplazar este trámite por un sistema similar al de Comisaría Virtual, utilizado durante la pandemia, donde el ciudadano registra la mudanza con Clave Única y obtiene un código QR que puede presentar ante Carabineros.
Otro caso destacado por Barañao es la normativa sobre el litio. El dirigente de la Fundación Pivotes señaló que, desde 1978, se decidió que el litio era un elemento de interés nuclear y su manipulación requiere la autorización de la Comisión Chilena de Energía Nuclear. Esto persiste a pesar de que hoy el litio se usa principalmente en baterías y se comercializa libremente en el resto del mundo. Barañao argumentó que estas trabas legales, al crear un "ambiente hostil para generar negocio", terminan afectando a toda la economía y a la generación de empleo.
El 'Agilizódromo' se enfoca en dos categorías de burocracia: la de nivel administrativo, que puede ser modificada por el Poder Ejecutivo, y la de nivel legal, que requiere cambios a través del Congreso. La plataforma, que Barañao comparó con una 'wiki' por su naturaleza colaborativa, ya ha identificado 55 ejemplos de normativas que podrían ser optimizadas y aspira a "tener cientos". La iniciativa busca ser un "repositorio definitivo de propuestas de optimización regulatoria", permitiendo que la ciudadanía aporte sus propios "nudos" burocráticos y un comité editorial de la fundación decida qué propuestas publicar, ya sea con carácter de "validación" o "polémica" según el caso.
La Fundación Pivotes ha puesto en marcha el 'Agilizódromo', una iniciativa digital diseñada para abordar el envejecimiento y la obsolescencia de la normativa chilena. Según Joaquín Barañao, miembro de la fundación, el objetivo es crear una plataforma "muy rica, muy completa de oportunidades de rediseños más inteligentes de la regulación". La propuesta busca identificar y modificar aquellas normas que, si bien pudieron tener sentido en su momento, hoy resultan excesivamente costosas o han sido superadas por la tecnología.
Barañao explicó que el marco legal y reglamentario "va envejeciendo" y que, en muchos casos, el riesgo ponderado en el pasado fue "demasiado conservador", sacrificando "mucho para prevenir cierta probabilidad". Como ejemplo, citó el permiso notarial para mudanzas, una medida que data de hace 50 años, cuando el objetivo era demostrar que los muebles no eran robados. La fundación propone reemplazar este trámite por un sistema similar al de Comisaría Virtual, utilizado durante la pandemia, donde el ciudadano registra la mudanza con Clave Única y obtiene un código QR que puede presentar ante Carabineros.
Otro caso destacado por Barañao es la normativa sobre el litio. El dirigente de la Fundación Pivotes señaló que, desde 1978, se decidió que el litio era un elemento de interés nuclear y su manipulación requiere la autorización de la Comisión Chilena de Energía Nuclear. Esto persiste a pesar de que hoy el litio se usa principalmente en baterías y se comercializa libremente en el resto del mundo. Barañao argumentó que estas trabas legales, al crear un "ambiente hostil para generar negocio", terminan afectando a toda la economía y a la generación de empleo.
El 'Agilizódromo' se enfoca en dos categorías de burocracia: la de nivel administrativo, que puede ser modificada por el Poder Ejecutivo, y la de nivel legal, que requiere cambios a través del Congreso. La plataforma, que Barañao comparó con una 'wiki' por su naturaleza colaborativa, ya ha identificado 55 ejemplos de normativas que podrían ser optimizadas y aspira a "tener cientos". La iniciativa busca ser un "repositorio definitivo de propuestas de optimización regulatoria", permitiendo que la ciudadanía aporte sus propios "nudos" burocráticos y un comité editorial de la fundación decida qué propuestas publicar, ya sea con carácter de "validación" o "polémica" según el caso.
Fuente información: Rocío Gambra