Ex cura pedófilo irlandés fue voluntario en Holanda
Fuente: Beatriz Díez Hernando - Radio Nederland Wereldomroep.
Un sacerdote irlandés convicto por crímenes sexuales contra niños ha estado trabajando como voluntario en una iglesia cercana a la ciudad portuaria holandesa de Rótterdam.
El cura, Oliver O’Grady, quien fue expulsado del sacerdocio después de su condena, ayudaba como diácono en misas de la iglesia angloparlante del Sagrado Corazón, Cristo Redentor. También organizaba fiestas para niños y actuaba como voluntario en centros de refugio de mujeres.
La iglesia en Schiedam sirve a la comunidad de expatriados en Rotterdam. Un sacerdote de la iglesia católica señaló a la prensa que no conocía los antecedentes de O¡Grady. Parroquianos locales dijeron a la prensa que estaban consternados después de que se revelara la historia pasada a través de un anuncio de la iglesia la semana pasada. El ex sacerdote usaba el apodo de “Hermano Francis” y su verdadera identidad fue descubierta sólo cuando la televisión holandesa emitió un documental titulado “Líbranos del mal”, anteriormente en este mes.
Sin contacto con niños
Un portavoz de la iglesia dijo a Radio Nederland Wereldomroep que el hombre estuvo allí desde 2008 hasta febrero de 2010.
“El hombre llegó a nuestra parroquia, venía a los servicios y ayudaba con la música. Trabajaba solo. No mantuvo ningún contacto con niños ni tampoco los buscó. Trabajaba con monjas en un hogar para indigentes, pero todo lo que hizo fue repartir comida entre la gente. Y solamente quería ir a la iglesia.”
El padre Avin Kunnekkada, uno de los sacerdotes itinerantes que presta servicios a la comunidad dice: “Él no era sacerdote aquí y probablemente no se presentó como tal cuando llegó”.
Dublín
Hallado culpable de abusar sexualmente a dos hermanos, Oliver O’Grady pasó siete años en prisión en EE:UU., después de lo cual fue deportado a Irlanda. Ha sido acusado de abusar de más de 20 niños y niñas, incluyendo un bebé.
El ex sacerdote ya había abandonado la iglesia de Schiedam cuando apareció la noticia. Se dice que vive en un hostal en Dublín. Varias de sus víctimas estadounidenses han iniciado acciones contra O’Grady.
El descubrimiento del pasado del ex sacerdote llega luego de una serie de revelaciones durante las pasadas semanas de Radio Nederland Wereldomroep y el diario RNC Handelsblad sobre abusos contra niños por parte de sacerdotes y monjas católicos en escuelas y lugares de acogida.
Un sacerdote irlandés convicto por crímenes sexuales contra niños ha estado trabajando como voluntario en una iglesia cercana a la ciudad portuaria holandesa de Rótterdam.
El cura, Oliver O’Grady, quien fue expulsado del sacerdocio después de su condena, ayudaba como diácono en misas de la iglesia angloparlante del Sagrado Corazón, Cristo Redentor. También organizaba fiestas para niños y actuaba como voluntario en centros de refugio de mujeres.
La iglesia en Schiedam sirve a la comunidad de expatriados en Rotterdam. Un sacerdote de la iglesia católica señaló a la prensa que no conocía los antecedentes de O¡Grady. Parroquianos locales dijeron a la prensa que estaban consternados después de que se revelara la historia pasada a través de un anuncio de la iglesia la semana pasada. El ex sacerdote usaba el apodo de “Hermano Francis” y su verdadera identidad fue descubierta sólo cuando la televisión holandesa emitió un documental titulado “Líbranos del mal”, anteriormente en este mes.
Sin contacto con niños
Un portavoz de la iglesia dijo a Radio Nederland Wereldomroep que el hombre estuvo allí desde 2008 hasta febrero de 2010.
“El hombre llegó a nuestra parroquia, venía a los servicios y ayudaba con la música. Trabajaba solo. No mantuvo ningún contacto con niños ni tampoco los buscó. Trabajaba con monjas en un hogar para indigentes, pero todo lo que hizo fue repartir comida entre la gente. Y solamente quería ir a la iglesia.”
El padre Avin Kunnekkada, uno de los sacerdotes itinerantes que presta servicios a la comunidad dice: “Él no era sacerdote aquí y probablemente no se presentó como tal cuando llegó”.
Dublín
Hallado culpable de abusar sexualmente a dos hermanos, Oliver O’Grady pasó siete años en prisión en EE:UU., después de lo cual fue deportado a Irlanda. Ha sido acusado de abusar de más de 20 niños y niñas, incluyendo un bebé.
El ex sacerdote ya había abandonado la iglesia de Schiedam cuando apareció la noticia. Se dice que vive en un hostal en Dublín. Varias de sus víctimas estadounidenses han iniciado acciones contra O’Grady.
El descubrimiento del pasado del ex sacerdote llega luego de una serie de revelaciones durante las pasadas semanas de Radio Nederland Wereldomroep y el diario RNC Handelsblad sobre abusos contra niños por parte de sacerdotes y monjas católicos en escuelas y lugares de acogida.
